JUEVES Ť 31 Ť MAYO Ť 2001
Ť Protestan maestros, alumnos y padres de familia
Inconformes exigen la renuncia del director del Ollin Yoliztli
ARTURO JIMENEZ
Con críticas por la presunta desatención a los programas escolares, hostilidad hacia maestros y alumnos disidentes, violación de derechos laborales de docentes y trabajadores, desinformación interna, favoritismos y autoritarismo, unos 60 maestros, alumnos y padres de familia exigieron ayer la renuncia del director del Centro Cultural Ollin Yoliztli, Ricardo Fuentes.
En una reunión afuera del centro cultural, en Periférico Sur, los inconformes plantearon diversos problemas en las tres escuelas de enseñanza artística que funcionan en el recinto y que con unos 130 maestros atienden a cerca de mil 200 alumnos.
Las escuelas son la de Iniciación a la Música y a la Danza, que atiende a niños; la de Música Vida y Movimiento, y Nueva Danza en la Ollin. El centro cuenta, además, con dos galerías y áreas de divulgación. La Filarmónica de la Ciudad de México, que ahí tiene su sede, se maneja de manera independiente.
Entre los inconformes estaban Consuelo Sánchez Salas, directora académica de la Escuela Nueva Danza en la Ollin y coordinadora de Educación Continua, así como Fausto Díaz Rivas, director de la Escuela Vida y Movimiento.
El centro cultural lleva 20 años de trabajo y un amplio prestigio de sus egresados, pese a su azarosa historia: irregularidades jurídicas sobre la propiedad y uso del inmueble, falta de reconocimiento oficial a programas de estudio y haber dependido de distintas instancias: Fonapas, Socicultur, CNCA y, ahora, del Instituto de Cultura de la Ciudad de México.
En la lateral del Periférico los inconformes pusieron dos mantas. ''Respeto académico a nuestras escuelas. šYa basta! de los saqueadores en el arte", decía una. ''Andrés Manuel López Obrador, apóyenos para que salga Fuentes de la Ollin", pedía otra.
Durante la protesta Ricardo Fuentes se encontraba en una reunión en el Instituto de Cultura del DF. Pero Juan Carlos Castellanos, vocero de la institución, rechazó las acusaciones contra el funcionario y señaló: ''Ya que Fuentes estabilizó al Ollin en casi dos años de trabajo, consiguió apoyos como una entrega de instrumentos, entre ellos 22 pianos, resolvió rezagos jurídicos, dio mantenimiento correctivo al edificio y ya que se reconocerán los estudios por parte de la Universidad de la Ciudad de México, Fausto Díaz quiere ser el nuevo director."
Incluso, Castellanos dijo que Fuentes se ha reunido ya en cuatro ocasiones con Enrique Semo, titular del ICCM, y éste ha manifestado su beneplácito ante la transformación del centro cultural.
En entrevista, Fausto Díaz respondió que ese no es el motivo de la inconformidad, y comentó: ''Yo estoy con la comunidad de la escuela de música, fui alumno y maestro de aquí, estuve como pianista con la Filarmónica. Estoy luchando por la Escuela de Música Vida y Movimiento. Que la gente me proponga y me pida que me encargue del CCOY por la confianza que tienen en mí, eso no lo puedo evitar".
Díaz y Consuelo Sánchez expresaron que el problema fundamental es que Ricardo Fuentes da prioridad a la extensión y la divulgación, pero a costa de descuidar el área educativa.
Tras aclarar que la inconformidad no es contra el gobierno capitalino, del que han recibido apoyo, abundaron: ''A partir de su nombramiento, Fuentes ha prometido consolidar el proyecto académico de la Ollin. Desgraciadamente, no ha sido así."