VIERNES Ť 25 Ť MAYO Ť 2001

Ť Fox en Saltillo

Posible inversión privada en gas seco

JUAN MANUEL VENEGAS ENVIADO

Saltillo, Coah, 24 de mayo. En el actual gobierno ''no somos neoliberales ni es una economía capitalista la que estamos poniendo en marcha'', afirmó el presidente Vicente Fox. Según esta definición, su administración sigue ''un modelo humanista que pone en el centro a la familia y a la persona, y significa equidad, esto es, buscar que se distribuya el ingreso y atemperar las diferencias entre las regiones del país''.

Y horas más tarde, un nuevo anuncio por parte del Presidente: a la par de la iniciativa para la apertura del sector eléctrico, presentará otro proyecto que permita la entrada del capital privado, nacional y extranjero, en la exploración y extracción de gas seco, no asociado al petróleo.

Tan sólo con estas dos reformas, dijo, estaríamos en posibilidades de asegurar inversiones mínimas por más de 10 mil millones de dólares cada año. No sólo eso, también ''nos darían garantía y seguridad de contar con esa energía para que pueda crecer la economía''.

Sobre las expectativas económicas, el mandatario dijo: los 40 mil millones de dólares que el país tiene en sus reservas ya no crecerán. ''El banco central ha decidido que ya no quiere tener muchas más, y tiene razón, porque es un costo tener reservas de esa magnitud, cuando ya las mismas dan garantía y blindaje a la economía, independientemente de las líneas de crédito que nos han ofrecido el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial para cualquier contingencia''.

De gira por esta entidad, Fox expresó un nuevo concepto de lo que se debe esperar en su sexenio: ni neoliberalismo ni capitalismo. La prioridad es asegurar la equidad en la educación y en el acceso a un sistema de salud de calidad y de calidez; asimismo, garantizar oportunidades de empleo a todos. ''Tenemos muy claro, entonces, cuál es el rumbo, hacia dónde vamos y cómo esperamos llegar. No somos neoliberales ni es una economía capitalista la que estamos poniendo en marcha; es un modelo humanista... nos preocupa, sí, la estabilidad macroeconómica y habremos de asegurar disciplina y orden fiscal, pero sólo como un medio para que logremos lo principal, y ello es que el fruto del desarrollo llegue a la mesa de cada familia en México, ahora y en el futuro'', dijo Fox en la visita que hizo a la planta Motores Saltillo, de Daimler Chrysler de México.

Horas después, en conferencia con la prensa que ofreció luego de reunirse con el gobernador Enrique Martínez, abundaría a pregunta expresa en la definición de su gobierno: ''Es muy sencillo (aquello del modelo humanista), se trata de tomar todas las decisiones que tengan que ver con la economía con un sentido social, humanista. Esto es, siempre tener como meta y como resultado de cada decisión y de cada acción que se impulse un fin último, que es mejorar el ingreso de cada familia y la calidad de vida'' de todos los ciudadanos.

Ahí está, insistió, ''la meta última'' de su programa de gobierno, y todas las decisiones que se toman en materia inflacionaria y fiscal, entre otras, van por ese camino.

''Este es, pues, el espíritu humanista, para beneficiar a cada familia y cada persona. En la misma dimensión la palabra y el concepto significan equidad: buscar que se distribuya el ingreso; buscar atemperar las diferencias entre las regiones del país; atemperar las diferencias entre las personas, en todos los sentidos, buscando, repito, siempre la equidad".

De las iniciativas que prevé presentar al Congreso, el Ejecutivo federal indicó que su idea es la de eliminar poco a poco ''cuellos de botella'' que inhiben la productividad y el despegue económico del país. ''Vamos a buscar abrir a la inversión privada algunas áreas de energía, como es el caso de la generación de electricidad y del gas seco, no asociado al petróleo... Son dos iniciativas que van en ese sentido y que nos asegurarán la energía necesaria para mover al país''.

Se trata -dijo- de liberar a la paraestatal, porque ''ahí no vamos a privatizar, no estamos proponiendo eso ni nada que se le parezca; esto es clave e importante, puesto que la empresa se ha venido descapitalizando, la hemos ordeñado hasta sus últimas consecuencias y hoy cada día somos más dependientes de las importaciones de gas, de gas natural, de diesel, de gasolinas y, en fin, de muchos artículos de la petroquímica. šCada día importamos más y más!''.

Pemex necesita pasar a un nuevo régimen fiscal, igual que cualquier otra empresa en el mundo, y que pueda reinvertir, modernizarse y producir para los mexicanos ''enormes dividendos y no sólo preocupaciones de que el día de mañana ya no vamos a tener los hidrocarburos que supuestamente tenemos''.