JUEVES Ť 24 Ť MAYO Ť 2001

Ť Se busca garantizar la integridad de usuarios: AMLO

Revisarán a fondo el sistema de seguridad en el transporte

Ť Confirma peritaje que el choque de dos trenes ligeros se debió a error humano, dice Bátiz Ť Se descarta un sabotaje

RAUL LLANOS, LAURA GOMEZ Y FABIOLA MARTINEZ

Luego del choque de dos convoyes el lunes pasado, el gobierno capitalino llevará a cabo una revisión a fondo de todo el sistema de seguridad en el transporte público de la capital, que comprende Metro, Tren Ligero y red de autobuses urbanos, con el objetivo de evitar otro percance y garantizar la seguridad de los millones de usuarios de esos medios de transporte, afirmó el jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador.

Y con relación al percance vial, el procurador de Justicia del Distrito Federal, Bernardo Bátiz, aseguró que los responsables de estos hechos "pueden ser los conductores y quizá algún otro servidor público encargado de dar las señales", pero será el Ministerio Público el que, primero, así lo determine y, luego, precise el grado de responsabilidad de cada uno de ellos. Además, descartó toda posibilidad de sabotaje en el caso.

Ambos ofrecieron una conferencia de prensa después de inaugurar el Centro de Seguridad y Procuración de Justicia de la delegación Magdalena Contreras, y allí el titular de la PGJDF detalló que se tiene ya el peritaje en cuanto a transporte terrestre y las conclusiones son que los dos vehículos iban aproximadamente a 40 kilómetros por hora en una curva en la que deberían ir a 15 kilómetros.

Entonces, dijo, el impacto fue de dos fuerzas similares, y si uno de los vehículos hubiera estado estacionado o circulando a una velocidad menor hubiera sido desplazado por el que venía a mayor velocidad, pero no fue así. Confirmó, también, que el accidente se debió a un error humano derivado de una comunicación no atendida. "Uno de los vehículos debería estar detenido, esperando que pasara el otro y no obedeció la orden, no la recibió adecuadamente y avanzaron los dos en forma indebida.

Lo que sí dejó claro es que "no hubo ninguna sustancia extraña que pudiera indicar algún intento de sabotaje o alguna cosa relacionada con una intencionalidad de que se produjera el accidente. Queda descartado totalmente esto, no hubo ningún sabotaje", puntualizó.

Añadió que los presuntos responsables, que podrían ser los conductores --por no respetar la velocidad en curva-- y el responsable de la señalización, serían procesados por lesiones y homicidio.

Con respecto a la revisión del sistema de seguridad en el transporte público, López Obrador dijo que en este proceso se atenderán las opiniones, denuncias, críticas que realicen los ciudadanos, organizaciones políticas, sociales e incluso los diputados, independientemente de su filiación política y no se desdeñará ninguna.

Niegan falta de mantenimiento

Por otra parte, el director del Tren Ligero, Héctor Guerra, rechazó que el mencionado accidente haya sido por falta de mantenimiento de las unidades, capacitación de los conductores Genaro Montiel y Daniel Gutiérrez --quienes en sus cuatro años de servicio han recibido un entrenamiento constante-- o por los trabajos de ampliación del radio de la curva Puerto Rico.

Dijo que si el peritaje de la PGJDF confirmó que la causa fue un error humano, los trabajadores recibirán una sanción, pues carecen de elementos para decir que no sabían qué hacer en dicho tramo, el cual se encuentra en reparación desde hace tiempo, y tienen la obligación de mantener una comunicación constante con el regulador.

El director del STE, Mario Zepeda, precisó que el tren de la corrida 7, con dirección a la estación Xochimilco, se mantuvo en contacto permanente con el puesto central de operaciones para salir, situación que no se produjo con la corrida 8, que llegaba a Taxqueña, pese a los intentos del personal encargado del uso de vía --reguladores-- para abrir un canal de comunicación e indicarle si procede su avance.

De acuerdo con el análisis de las últimas grabaciones registradas a las 21:32 horas del lunes pasado, el silencio fue la única respuesta obtenida de la corrida ocho, conducida por Genaro Montiel, que iba a una velocidad de 65 kilómetros y la redujo a 58 cuando se produjo la colisión con el otro tren, que iba a 40 kilómetros. En ambos casos se rebasó la velocidad permitida de 35 kilómetros en promedio.

Deficiencia técnica

Benito Bahena Lome, dirigente de la Alianza de Tranviarios de México (ATM), que agrupa a los operadores de trolebuses, tren ligero y autobuses plegados, señaló que el accidente del pasado lunes en Taxqueña fue producto de una "deficiencia técnica" entre los encargados de los puntos de control y los conductores.

Indicó que la organización gremial que encabeza aceptará el dictamen, responsabilidad y sanción que corresponda a los trabajadores involucrados siempre que el dictamen se desprenda de una investigación seria y profunda.

Dijo que el percance en el que murió una persona y más de 40 personas resultaron lesionadas se debió a un "error humano" visto desde una perspectiva inicial; sin embargo, será necesario esperar las conclusiones de la investigación.