MIERCOLES Ť 23 Ť MAYO Ť 2001
Ť Las firmas internacionales Moody's y Fitch le otorgan al débito la calificación triple A
Restructura el gobierno 10% de su deuda total; ahorrará mil 500 mdp
Ť Para este año se tiene previsto renegociar 16 mil millones de pesos, señala Carlos Urzúa
RAUL LLANOS SAMANIEGO
Bajo el mecanismo innovador de la subasta pública, el Gobierno del Distrito Federal restructuró poco más de 10 por ciento de su deuda total, que hoy día asciende a 28 mil 424 millones de pesos, y que por los plazos y términos acordados con la banca comercial le permitirá ahorrar mil 500 millones de pesos.
Así lo precisaron el Ejecutivo local, Andrés Manuel López Obrador; el secretario de Finanzas, Carlos Urzúa, y el director de Administración Financiera, Arturo Herrera, quienes también informaron que ayer las firmas calificadoras internacionales Moodyƀs y Fitch otorgaron la calificación máxima triple A a la deuda del gobierno local, lo que le permitirá ventajas al momento de renegociar su débito.
En conferencia de prensa, Arturo Herrera dijo que por primera vez en el país, el GDF restructuró 3 mil millones de pesos bajo el mecanismo de subasta pública, por lo que al lanzar la convocatoria tomaron parte 10 de las más grandes instituciones bancarias nacionales, de las cuales tres salieron empatadas y con ellas se llevó a cabo este proceso: Banorte, Santander Mexicano y Serfin.
Las condiciones que se pactaron con ellas, dijo, son a 14 años, con un periodo de gracia de tres, y una tasa de interés que pasa de TIIE (Tasa de Interés Interbancaria de Equilibrio) más 1 a TIIE más .48, que implicará que al vencimiento de este acuerdo se habrán ahorrado mil 500 millones de pesos. De ahí que hace un par de días el Ejecutivo local firmó los documentos oficiales de este trámite financiero.
Carlos Urzúa dijo que para este año se tiene previsto restructurar los 16 mil millones de pesos --factibles de renegociar--, y por lo pronto en fechas próximas se lanzará de nuevo otra convocatoria para que tomen parte en la subasta todos los bancos interesados, incluso los tres que ganaron este primer proceso.
Al tomar la palabra, Andrés Manuel López Obrador explicó que hasta el año pasado el GDF tenía la obligación de contratar, cuando menos, 50 por ciento del endeudamiento neto con la banca de desarrollo en general y con Banobras en particular, razón por la cual son tres las instituciones que manejan la deuda de la administración local: Bancomer, Banamex y, precisamente, Banobras.
Empero, dijo el mandatario estatal, el Congreso federal modificó el artículo 2 de la Ley de Ingresos de la Federación, con lo que ahora se está en la libertad de contratar con quien dé mayores ventajas al momento de restructurar.
López Obrador explicó que ésta es la primera vez que un gobierno local recurre al mecanismo de subasta pública, ni siquiera la Federación lo hace así, sino que asigna de manera discrecional qué instituciones bancarias habrán de manejar la deuda, por eso "los banqueros se sorprendieron cuando se anunció esto porque antes no se hacía.
"Se decidió recurrir a este procedimiento por garantizar un proceso muy transparente y permitir que los bancos entren a una competencia y así el GDF obtenga las mejores condiciones de restructura", añadió, y resaltó que el GDF ya no esté obligado a contratar con Banobras, el cual, "desde un principio lo dijimos", tenía tasas de interés muy altas.
El jefe de Gobierno precisó que su administración desembolsa 5 mil millones de pesos al año por el servicio de la deuda, y que en la medida en que se vaya restructurando deuda se aminorarán esos pagos.
Fobaproa, robo en despoblado
En la conferencia de prensa, el mandatario local se refirió al Fobaproa, y dijo que como se negoció es igual a "un robo en despoblado", por lo que instó a las autoridades federales a sentarse a negociar nuevas condiciones con los banqueros, ya que sólo este año implicará erogar 80 mil millones de pesos.
"No dejaremos de insistir, no quitaremos el dedo del renglón en eso, porque fue el saqueo más grande en la historia de nuestro país; fue un boquete que dejó afectadas las finanzas públicas", y lo que es peor, dijo, es que ahora el tributo que se pagaba a la banca nacional será a los extranjeros. Ahora el gobierno federal insiste en su reforma fiscal, a lo único que ayudará es a que tengan más dinero y se pueda pagar los altos intereses del Fobaproa.