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México, D.F. domingo 20 de mayo de 2001 
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Correo Ilustrado
  
Rodríguez Oceguera sin credibilidad: Aguayo 

Señora directora: Le solicito, una vez más, espacio para el siguiente mensaje a los lectores de La Jornada. 

En cartas y artículos publicados en La Jornada, Primitivo Rodríguez Oceguera se ha dedicado a manipular de manera intencionada la información para, de esa manera, probar teorías conspiratorias. 

Incapaz de construir, Primitivo quiere hacerse de un lugar en el mapa político manchando el trabajo y el prestigio de organizaciones como Alianza Cívica y la Comisión Mexicana de Promoción y Defensa de los Derechos Humanos, e insultando a personas como Mariclaire Acosta, Rogelio Gómez-Hermosillo y quien esto escribe. 

Hace tiempo se erigió en juez que dicta sentencias sobre la moralidad pública queriendo, de esa manera, disimular su pasado turbio como asociado político de Rafael Aguilar Talamantes, asesor de Jaime Serra Puche y empleado de Ernesto Zedillo. 

No le concedo ni credibilidad ni representatividad al personaje, pero como sus acusaciones son muy graves, diversos lectores me han escrito o llamado preguntándome sobre ellas. Ya he abordado en diversas conferencias el asunto del financiamiento internacional aprobado de manera colegiada por las organizaciones de las que he formado parte (entre otras, Alianza Cívica y la Academia Mexicana de Derechos Humanos). No tengo nada de qué avergonzarme u ocultar. 

Acabo de aceptar la invitación para impartir una conferencia pública sobre ese mismo tema en agosto próximo en la ciudad de México. Dado el interés que ha mostrado La Jornada en este asunto, si no tiene inconveniente, informaré en este mismo espacio sobre el lugar y hora en que se realizará dicha plática. 

Sergio Aguayo Quezada 


Niega Martí Batres haber participado en reunión con Fox 

Señora directora: Solicito atentamente insertar en El Correo Ilustrado una aclaración a la nota cuyo encabezado dice: "Busca Fox acuerdo con los partidos para que se apruebe la reforma hacendaria". 

Dicha información aparece en la página tres de la edición correspondiente al 18 de mayo y señala, erróneamente, que estuve presente en la reunión que tuvo Vicente Fox con los coordinadores parlamentarios, luego de que aquel diera a conocer "su informe" semestral el pasado miércoles 16 del presente. 

Ese día, mi tiempo lo ocupó la presentación, en el Senado, de la iniciativa de ley de Cocopa en la Comisión Permanente y la proposición de un punto de acuerdo para que el gobierno foxista retire la excesiva campaña publicitaria con la cual pretende la aprobación de "su" reforma fiscal. 

Sobre el particular, reitero que la postura del PRD es rechazar absolutamente la imposición del IVA a medicinas, alimentos, libros, transporte y prestaciones sociales, entre otros rubros. Sirvan estás líneas para aclarar al gran público lector de La Jornada que el PRD es el único partido que ha presentado una propuesta alternativa de reforma fiscal y que es totalmente diferente a la que remitió el Ejecutivo para su discusión. 

Martí Batres, coordinador del PRD en la Cámara de Diputados 


Cancela universidad queretana repatriación de investigadora 

Señora directora: Solicito la publicación de la presente, dirigida al presidente Vicente Fox: 

En noviembre de 1999, con certificados de maestría y doctorado en mano, me incorporé a la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) bajo el prometedor Programa de Repatriación de Investigadores Mexicanos. Poco después empezó la pesadilla: reunir la documentación para la solicitud tomó seis meses, dada la carencia del equipo mínimo indispensable para realizar mi parte del "paquete" y la actividad favorita de los actuales administradores de la UAQ: la tramitología

Durante ese intervalo de papeleo vacuo, mi pago salarial y demás prestaciones de ley quedaron a merced de estos funcionarios. En esas fechas descubrí que mi caso no era el único, ya que en esta institución el "respaldo total" a la ciencia/científicos se expresa, poco más o poco menos, mediante pagos por honorarios, sin inscripción al seguro social, aguinaldo ni demás prestaciones; con retenciones injustificadas de los recursos obtenidos por medio de becas de investigación, entre otros "apoyos", tal y como demuestra el documento anexo firmado por la suscrita y otros ocho investigadores repatriados, cuyo silencio evidencia el temor ante la impunidad patente de estas autoridades. 

Hace algunas semanas la rectoría decidió de manera unilateral e injustificada cancelar mi repatriación. Desde entonces, el hostigamiento y la coersión se ha recrudecido mediante la táctica tradicional de los autócratas: mi salario se ha reducido a poco más de 2 mil pesos quincenales (ver anexo 2), quedando entonces en espera de mi hastío, bancarrota y eventual abandono de la institución para librarse, como suele suceder, de cualquier responsabilidad como patrón. 

La respuesta no oficial del Conacyt en cada uno de los nueve casos fue: "Búscate otra institución, pues ahí no les interesa". La pregunta es, señor Fox: ¿Para qué sirve el programa de repatriación si el interesado principal, la universidad pública, está ecabezada en ocasiones por burócratas, cuyos intereses son distintos a la excelencia académica, a la excelencia en la investigación y al desarrollo de tecnología en beneficio de México? 

¿Cuál será el alcance real de las docenas de programas federales multimillonarios de "apoyos a la ciencia" mientras estos funcionarios puedan escudarse detrás del abusado concepto de "autonomía universitaria"? ¿Cuántos investigadores más, repatriados o no, existen en la UAQ y en el resto del país sufriendo este tipo de abusos? 

La verdad es que mientras se permita que este tipo de administradores continúe al frente de instituciones como la UAQ, la licencia y los investigadores en México estamos destinados a desaparecer. No ignorando los métodos clásicos empleados por este tipo de personajes, hago desde hoy responsable a la administración actual de la UAQ de cualquier accidente o atropello adicional a los ya padecidos que sufra la suscrita o su familia. 

Dra. Mayella Almazán Arreola, maestría en Lingüística, University College London; doctorado en Psicolingüística y Neurolingüística, University of Essex, Reino Unido 
 

 

 

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