SABADO Ť 19 Ť MAYO Ť 2001

Ť El superagente Marshall, preocupado por reportes falsos

Minada la credibilidad de la DEA por mentir sobre decomisos de drogas

JIM CASON Y DAVID BROOKS CORRESPONSALES

Washington, 18 de mayo. El gobierno estadunidense no se cansa de advertir a otros países sobre la creciente amenaza del narcotráfico internacional que transporta drogas a esta nación a través de México y el Caribe, pero ahora su credibilidad esta minada por sus propios agentes, y acusaciones de que mintió sobre el problema de la droga y sus acciones en contra, por lo menos en el caso de Puerto Rico.

El policía antinarcóticos de más alto rango, el administrador de la DEA (Drugs Enforcement Agency) Donnie Marshall, informó esta semana que está" bastante preocupado" por versiones de que el encargado de operaciones internacionales de su agencia pudo haber participado en un complot para fabricar reportes falsos sobre arrestos antinarcóticos y exagerar la dimensión del narcotráfico en el Caribe.

Marshall informó que su oficina ha co-menzado una severa investigación sobre estas alegaciones.

Los comentarios de Marshall se produjeron después de que varios agentes de la DEA asignados a las oficinas de la agencia en San Juan, Puerto Rico, alegaron que las estadísticas de confiscación de drogas y de arrestos por esa oficina eran, de forma rutinaria, falsificados por agentes que buscaban promover sus carreras profesionales.

El periódico Miami Herald reportó esta semana que "un ex supervisor (en la oficina de la DEA en San Juan) calculó que cerca de 70 por ciento de los arrestos que reportó la DEA entre 1998 y el 2000 eran ficticios", y que los agentes que se quejaban de estas estadísticas falsas fueron trasladadas de la oficina en San Juan.

Mas allá de fabricar estadísticas, varios agentes de la DEA informaron al Miami Herald que sus colegas estaban asignándose el crédito por arrestos menores de droga realizados por la policía local, incluyendo los detenidos por montos menores de co-caína y mariguana.

La DEA tiene órdenes de limitar su enfoque a casos mayores, donde se trate de por lo menos cinco kilos de cocaína o más, o 50 libras de mariguana.

Pero el Herald cita a agentes de la DEA anónimos que alegan que el jefe de la oficina de San Juan, el agente Michael Vigil, demandó más arrestos para promover su propia carrera funcionaria.

Vigil logró avanzar para convertirse en director de la División Internacional de la DEA, encargada de supervisar las operaciones de más de 500 agentes en 56 países.

Las acusaciones de los agentes de la DEA sobre las mentiras en los informes en las estadísticas se dieron a conocer sólo meses después de que Vigil reconoció, en entrevista con el Miami Herald, que algunas de las estadísticas reportadas por su agencia en torno a un operativo mayor el año pasado no fueron del todo precisas.

El senador Mike DeWine le preguntó al administrador de la DEA sobre las versiones en una audiencia legislativa, realizada esta semana, de que las cifras oficiales fueron falsificadas, y respondió Marshall que "he tenido conocimiento de esa situación por algunas semanas".

"Hay asuntos sobre los cuales estoy bastante preocupado. Declinaría un mayor co-mentario público hasta que haya tenido la oportunidad de concluir la evaluación ad-ministrativa. Pero estoy muy preocupado sobre la integridad de nuestras estadísticas", admitió el funcionario antidrogas.