Ť En represalia, Israel bombardeó Nablus, Ramallah, Tulkarem y Gaza
Atentado suicida palestino en Netanya deja seis muertos en centro comercial
Ť El grupo integrista Hamas se atribuyó la acción como venganza por la muerte de cinco policías Ť Tel Aviv justificó el golpe y la muerte de nueve civiles "por la gravedad" de la acción kamikaze
AFP, REUTERS, AP Y DPA
Nablus, 18 de mayo. Israel atacó hoy con aviones de combate F-16 y helicópteros militares las localidades de Nablus, Ramallah, Tulkarem y Gaza, en represalia por un atentado suicida ocurrido en la mañana en un centro comercial de la ciudad de Netanya con saldo de seis muertos, incluido el kamikaze palestino, y más de cien heridos. En los ataques aéreos murieron nueve palestinos.
El gobierno de Tel Aviv justificó el uso de los
F-16 argumentando "la gravedad" del atentado palestino --reivindicado
poco después por el grupo extremista Hamas--, y adelantó
que "no será la última vez" que recurra a esas naves para
responder a la violencia palestina.
"Los palestinos lo van a pagar muy caro", declaró
el ministro sin cartera israelí Danny Naveh.
La Autoridad Nacional Palestina (ANP) advirtió hoy que el uso de los aviones de combate por parte de Israel, por primera vez desde 1967, representa "una escalada muy peligrosa" y pidió a la comunidad internacional "hacer cesar estas matanzas contra civiles pa-lestinos y edificios de la policía y de los servicios de seguridad".
Tras el ataque suicida, el presidente estadunidense, George W. Bush, condenó "el nuevo nivel de intensidad" del conflicto en Me-dio Oriente, y demandó a los dirigentes de ambas partes "condenar claramente la violencia".
Javier Solana, alto representante para la Política Exterior y de Se-guridad Común de la Unión Europea, también condenó el atentado suicida y pidió a los responsables políticos de la región que reanuden el diálogo de paz.
El comienzo del fin
El atentado en Netanya, el tercero en este balneario desde que se inició la nueva intifada palestina el pasado 28 de septiembre, ocurrió a las 11:30 horas local, cuando un palestino identificado como Mahmud Ahmed Marmach intentó in-gresar al centro comercial Hasharon pero fue detenido por un guardia de seguridad.
Los uniformados sospecharon del palestino, de 21 años de edad, porque llevaba una chamarra, pe-se al intenso calor, quien al ser detenido detonó los explosivos, matando a cinco personas e hi-riendo a otras cien.
La explosión destruyó la entrada del inmueble y causó otros destrozos a locales cercanos.
En un principio se indicó que el número
de muertos era de siete "debido a una confusión a causa del estado
de los cuerpos, completamente despedazados", indicaron fuentes policiales.
La cifra de víctimas habría sido mucho
mayor si el kamikaze pa-lestino no hubiera sido localizado por los
guardias.
Decenas de personas gritaron "¡muerte a los árabes!", mientras la policía trataba de mantenerlos alejados del lugar del atentado.
Mahmud Ahmed Marmach era originario de la ciudad cisjordana de Tulkarem, y de acuerdo con sus familiares y vecinos era un mu-chacho tranquilo y nadie sospechaba de su pertenencia a algún grupo político o armado.
El grupo Hamas se atribuyó el atentado suicida durante una ma-nifestación en Gaza, y poco después difundió un comunicado en el que advirtió que se trata del "séptimo de 10 ataques" prometidos por la organización extremista hace unos meses.
El ataque de este viernes, agrega el documento, fue en represalia por la muerte de cinco policías pa-lestinos, ocurrida el lunes pasado en un incidente que Israel calificó como "un error, debido a informes equivocados".
Tras la explosión en Netanya, el primer ministro israelí, Ariel Sharon, se reunió con su gabinete de seguridad para analizar la respuesta de su gobierno: horas después cazas y helicópteros atacaron Na-blus y Ramallah.
En Nablus el blanco del bombardeo fue un puesto de seguridad palestino, donde funcionaba también una prisión.
Al parecer el blanco específico era la cárcel en la que se encontraba detenido Mahmoud Abu Ha-noud, activista de Hamas y considerado por Israel como uno de los jefes del brazo armado de ese gru-po. Abu Hanoud resultó herido y trasladado a otro lugar.
Agresiones simultáneas
En un ataque simultáneo, las tropas israelíes dispararon misiles contra edificios en los que viven miembros de la selecta Fuerza 17, el cuerpo de seguridad del presidente palestino, Yasser Arafat.
Ahí los servicios de rescate re-cuperaron un cuerpo. El número de heridos en estos dos ataques is-raelíes es de unos 90.
Luego, cazas israelíes dispararon contra Tulkarem, localizada a unos 12 kilómetros de Netanya, y por la noche atacaron un objetivo cercano a la oficina de Arafat en Gaza, mientras un F-16 y buques israe-líes atacaron la sede de la armada palestina en Beit Lahia. El saldo fue de entre 10 y 30 heridos.
En otros incidentes violentos, extremistas palestinos dispararon contra un vehículo israelí matando a un colono judío e hiriendo a dos más, en un atentado que fue reivindicado por el Frente Popular para la Liberación de Palestina Ahmad Jibril's.
Soldados israelíes hirieron a cin-co jóvenes que les lanzaban piedras en la franja de Gaza.
El jefe del Comité de Defensa y Relaciones Exteriores de Israel, Dan Meridor, acusó directamente a Arafat "y toda la banda que lo rodea" por la violencia.
Mientras, el asesor del dirigente palestino, Tayeb Abdel Rahim, declaró que la ANP "condena los ataques que utilizan como blancos a civiles e inocentes" y reiteró que la ola de violencia se detendrá sólo cuando se reanuden las negociaciones de paz.
El ministro palestino de Información, Yasser Abed Rabbo, sentenció que "ésta es una nueva es-calada, una nueva manera del te-rror israelí contra el pueblo palestino. Pero derrotaremos la ocupación de Israel".