Ť Piden al comisionado para la paz intervenga ante Fox para que suspendan operativos
Denuncian ONG patrullajes del Ejército en Chiapas
ELIO HENRIQUEZ Y VICTOR CARDOSO CORRESPONSAL Y ENVIADO
San Cristobal de Las Casas, Chis., 18 de mayo. El Comité de Derechos Humanos Fray Lorenzo de la Nada informó que desde el 14 de este mes el Ejército Mexicano realiza "patrullajes en caminos rurales y reales, en milpas, potreros y montañas" de las cañadas de Ocosingo.
En una breve carta dirigida al comisionado para la paz en Chiapas, Luis H. Alvarez, el organismo precisó que los patrullajes se realizan en las cercanías de las comunidades de Paraíso, San Jacinto Lacanjá, Ojo de Agua Tzotzil, Nuevo Mariscal, Nuevo Tila, Viejo Velasco Suárez y Cintalala.
"Confiamos en los buenos oficios de la comisión que le ha sido encomendada para que intervenga ante el comandante supremo de las fuerzas armadas mexicanas (el presidente Vicente Fox), solicitando que ordene la inmediata suspensión de estas y todas las actividades militares que incrementen la tensión en la zona de conflicto", manifestó.
El comité dijo que apenas hoy tuvo conocimiento de esta situación en las Cañadas, y teme que se extienda a otras áreas de la llamada zona de conflicto.
Por otra parte, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez denunció que policías municipales "detuvieron ilegalmente y golpearon" a dos indígenas choles originarios de la comunidad El Zapote, municipio de Salto de Agua.
En una carta dirigida a Nigel Rodley, relator especial de la Comisión de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) --divulgada en esta ciudad--, el organismo señaló que el pasado ocho de mayo, el indígena Pascual Cruz López y su hijo Mariano Cruz Montejo, de 63 y 25 años de edad, respectivamente, fueron encarcelados y golpeados por agentes pertenecientes al municipio de Palenque.
Según el centro, los policías responsables de este "acto ilícito" son Gabriel Cámara Hernández, Jerónimo Méndez Gómez y Enrique Guzmán Méndez, quienes, además de "golpear terriblemente" a los dos indígenas, les quitaron cuatro mil pesos en efectivo.
Aseguró que después de "haber sido golpeados y de que les robaron su dinero", padre e hijo fueron presentados ante el jefe policiaco, en donde "se les obligó a firmar documentos y que confesaran estar ebrios y haber golpeado a otra persona". Después, los dos choles fueron privados de su libertad por más de 24 horas en los separos de la policía municipal. Fueron liberados el nueve de mayo bajo amenazas de muerte.