Ť Las autoridades creen que es una acción de reclutamiento de las AUC
Secuestran paramilitares de ultraderecha a unas 300 personas en el oriente de Colombia
Ť Comunidades indígenas se declaran en "resistencia civil desarmada" contra la violencia
AP, AFP, DPA Y REUTERS
Santafe de Bogota, 16 de mayo. Al menos 300 personas fueron secuestradas en el oriente de Colombia por comandos paramilitares de extrema derecha, en lo que constituye el mayor plagio de la historia en el país sudamericano, al superar los efectuados hasta el momentos por las guerrillas.
El secuestro, que fue reivindicado esta noche por las
ultraderechistas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), se produjo en horas
de la noche del martes en el municipio de Villanueva, departamento de Casanare,
cuando unos 80 hombres armados in-terceptaron varios autobuses con trabajadores
agrícolas que regresaban de los cultivos de la palma africana.
"No secuestramos, hemos hecho el requerimiento de 300
ciudadanos en el departamento del Casanare para confirmar versiones de
inteligencia de las AUC sobre una posible infiltración de elementos
de la guerrilla comunista provenientes del área de distensión
(en la zona sur del país, bajo control de las Fuerzas Armadas Revolucionarias
de Colombia, FARC), que al parecer traen como fin controlar la industria
palmera como un inicio para expandir su hegemonía en las demás
áreas productoras", dijeron los paramilitares en un comunicado divulgado
esta noche por el canal privado de televisión Caracol.
Anunciaron que "una vez verificadas las hojas de vida de cada uno de los trabajadores requeridos continuarán con sus labores cotidianas, quedando únicamente 26 personas, quienes tienen que explicar ciertos comportamientos, y una vez establecidos éstos, retornarán a sus hogares".
El texto lleva la firma del "comandante HK", del bloque oriental de las AUC, organización liderada por Carlos Castaño.
Horas antes, el comandante en jefe de las fuerzas militares, general Fernando Tapias, dijo en conferencia de prensa que fueron 190 los secuestrados, pero la Fiscalía General indicó que había recibido 202 denuncias del plagio de los trabajadores agrícolas.
En horas de la noche, el gobernador de Casanare, William Pérez, señaló que la ci-fra de plagiados habría aumentado a 207, de acuerdo con denuncias ante la personería del gobierno y en la fiscalía.
Búsqueda y toque de queda
Mientras el ejército lanzaba una vasta operación en la región para dar con los plagiarios, la alcaldía de Villanueva decretó el toque de queda que regirá entre las 22 horas y las 5 de la mañana.
De hecho, durante todo el día hubo informes contradictorios en torno al número de plagiados, incluso una versión militar de que la mayoría de los rehenes habrían sido liberados, y el mismo Tapia había dicho que el ejército rescató a 63 personas gracias a su "presión", y que los secuestradores ya sólo tenían a 27 personas en su poder.
Tapias indicó que del total de secuestrados, 177 son trabajadores de las plantaciones de palma africana, y que entre ellos hay 53 menores de edad y una mujer, así como 13 lugareños.
De momento, añadió el militar, sólo se pu-dieron recuperar dos de los autobuses en que iban las personas antes de ser plagiadas.
El secretario de gobierno de Villanueva, Jaime Pérez, dijo que la mayoría de los plagiados son menores de 30 años.
El alcalde de Villanueva, Hildebrando León, señaló que en total fueron unos 800 los trabajadores interceptados por hombres vestidos con camuflage y armados, y que a continuación fueron seleccionados los que serían raptados.
Añadió que las autoridades manejaban la hipótesis de que esta acción tendría como fin reclutar combatientes para las AUC.
El informe anterior fue confirmado por el jefe del Departamento Administrativo de Seguridad, coronel Germán Jaramillo, el que dijo a la prensa que según los datos recabados por su oficina las AUC pretenden reclutar como combatientes a varios de los campesinos capturados.
El comandante de la cuarta división del ejército, general Arcesio Barrero, otro de los que atribuyó la autoría del plagio a las AUC, apuntó que eran unos 80 hombres y que en el momento de la intercepción de los labriegos les lanzaron arengas para que se les unieran.
Sin embargo, el general Tapias no se atrevió a confirmar nada y se concretó a señalar que las tropas persiguen a los delincuentes en una vasta zona de los llanos orientales entre los límites de Casanare y el Meta, y que en la región no sólo operan los paramilitares sino también las guerrillas de las FARC y el Ejército de Liberación Na-cional (ELN).
El mayor secuestro hasta antes del efectuado en esta ocasión por las AUC había sido cometido por el ELN el 30 de mayo de 1999, cuando uno de sus comandos armados irrumpió en un templo católico de Cali y se llevó a 150 feligreses.
Entonces, en los siguientes días los iz-quierdistas liberaron a la mayoría, pero otro número fue liberado meses después previo pago de altas sumas de dinero.
En tanto, comunidades indígenas del su-roeste del país se declararon en "resistencia civil desarmada" en repudio a los frecuentes ataques de los paramilitares de derecha y de las guerrillas, en el marco de una marcha iniciada en Santander de Quilichao y que culminará el viernes en Cali.