VIERNES Ť 11 Ť MAYO Ť 2001
Ť Los hechos, en 1995
Militares chilenos desaparecieron al químico Berríos
AFP, DPA, AP Y REUTERS
Santiago, 10 de mayo. Seis oficiales en activo del ejército de Chile serían los responsables de la desaparición y muerte en 1995, en Uruguay, del químico chileno Eugenio Berríos Sagredo, de acuerdo con un informe policial en manos del presidente Ricardo Lagos y dado a conocer por el diario electrónico El Mostrador.
En el informe del Departamento 5 de la Policía de Investigaciones y dirigido al sexto juzgado del Crimen, aparecen como implicados Martín Michael Borck Keim, Santiago Gerónimo Caradeux Franulic, Carlos Angel Espinoza López, Pedro Alejandro Jara Morales, José Guillermo Montenegro Valenzuela y Felipe Enrique Cabrera Palacios.
Estos militares habrían formado parte de la Dirección de Inteligencia del Ejército (DINE), quienes contaron con la colaboración de responsables uruguayos y argentinos a fin de dar con el paradero de Berríos tras su huida en noviembre de 1991.
El químico perteneció a las policías secretas del pinochetismo de la Dina y luego a la Cni, donde trabajaba en la fabricación de gas sarín y productos patógenos para matar a opositores. Sin embargo, tras su huida desapareció en Uruguay en 1992 y su cadaver fue hallado en abril de 1995 en un playa al este de Montevideo.
En Montevideo, el ex general Julio Rapela, uno de los duros de la dictadura uruguaya, y el diplomático estadunidense adscrito a la embajada del país sudamericano entre 1977 y 1981, John Youle, coincidieron en poner en duda la pertinencia de la búsqueda de los desaparecidos de aquella época.
Para Rapela, de 76 años, el impulso del presidente Jorge Batlle a una Comisión para la Paz que aclare el caso de unos 150 desaparecidos y la reconciliación, significa "un paso atrás en la vida del país".
A su vez, Youle también calificó de contraproducente la creación de la comisión porque, expuso, después de tantos años creará malestar en las filas militares y dado que los desaparecidos ya están muertos.
En tanto que familiares del diplomático español Carmelo Soria, asesinado por los militares en Chile en 1976, abogaban por la reapertura del proceso, el general Ricardo Izurieta dijo que el ejército chileno apoyará a todos los uniformados chilenos requeridos por la justicia argentina por el crimen del general Carlos Prats.