MIERCOLES Ť 9 Ť MAYO Ť 2001
Ť Se prevé liquidar a 10 o 15% de los trabajadores del sector, según líderes sindicales
Recortarán la planta laboral de la banca de desarrollo
FABIOLA MARTINEZ
El gobierno federal aplicará, en breve, un recorte de entre 10 y 15 por ciento de la plantilla de trabajadores que integran la banca de desarrollo, y al término de este sexenio se aspira a reducir 30 por ciento el tamaño de esta nómina.
Con base en un documento oficial filtrado a los líderes de sindicatos de este sector, derivado de los Criterios para la evaluación y compensación por resultados, la meta para este año es disminuir el costo del capítulo 1000, esto es, servicios personales, en el que se incluyen los salarios y prestaciones.
A diferencia de otros recortes en el sector bancario aplicados desde la crisis económica en 1995, los dirigentes sindicales afirman que "defenderán con todo" los empleos y en especial las prerrogativas incluidas en los contratos colectivos y condiciones generales de trabajo de los 85 mil empleados que integran actualmente la banca.
De acuerdo con una encuesta aplicada en Banobras, 80 por ciento de los sindicalizados reconocieron haber votado por Vicente Fox el pasado 2 de julio, mandatario del que ahora afirman estar "decepcionados" ante el inminente recorte de personal.
En el mismo riesgo se encuentran los cerca de 12 mil empleados de la banca de desarrollo distribuidos en Banobras, Bancomext, Nacional Financiera, Patronato del Ahorro Nacional y Banrural, organismos que han reducido drásticamente su plantilla laboral en los últimos años.
Desde 1986 Banobras -cuyo objetivo es dar créditos a estados y municipios, alentar la generación de infraestructura (carreteras, alcantarillados, servicio de agua y hasta construcción de mercados)- ha sufrido siete recortes presupuestales en los últimos 15 años e igual número de ajustes a la plantilla.
Luis Angel Romo, líder del sindicato de Banobras y quien coordina al resto de los sindicatos de la banca de desarrollo -a excepción de Bancomext, "el cual se conduce de manera independiente"-, atribuye este vaivén de presupuesto, cambio de programas y cuestionables niveles de eficiencia al frecuente cambio de directores generales, algunos de los cuales no rebasaron el año en esta función.
Tras la desaparición de Financiera Nacional Azucarera y del Banco del Pequeño Comercio, ex integrantes de la banca de desarrollo y ante la "inminente" reducción de personal, el dirigente afirma que los trabajadores no son responsables, sino la propia Secretaría de Hacienda, que no termina por definir qué quiere para este sector.
"Si alguien no ha sido revoltoso ni se ha manifestado en la calle es el trabajador bancario, pero ahora hay angustia entre la plantilla de trabajadores con promedio de antigüedad de entre 13 y 15 años, por lo que si las cosas se ponen difíciles no dudaremos en tomar las calles", dijo en entrevista.
En tanto, Enrique Aguilar Borrego, dirigente de la Federación Nacional de Sindicatos Bancarios (Fenasib), señaló que continúa el plan de ajuste en Banamex y BBV-Bancomer, lo que se suma a la problemática en la banca de desarrollo. Por ello, sostuvo que hay una "apremiante necesidad" de que el presidente Vicente Fox y su equipo definan "qué quieren para este sector".
"Hemos perdido 40 mil empleos desde la crisis bancaria que inició en 1994, por lo que ante decisiones irrevocables en materia de empleos no seremos grillos al afirmar que 'no permitiremos la pérdida de una sola plaza', pero sí advertimos que no cederemos ni un ápice de nuestros contratos colectivos o liquidaciones conforme nos corresponde".