MARTES Ť 8 Ť MAYO Ť 2001

Ť Incendios, entre los que más daños han causado

Pérdidas por 10 mil mdd dejan los desastres naturales en dos décadas

ANGELICA ENCISO Y ALONSO URRUTIA

Los desastres naturales registrados en México durante las dos últimas décadas representaron pérdidas por 10 mil millones de dólares, debido al daño patrimonial que sufrieron los ciudadanos, las empresas e instituciones públicas, además de los productores de materias primas, que resultaron seriamente afectados al perder sus cosechas, refiere un análisis de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

En ese periodo se presentaron al menos siete fenómenos que causaron graves daños al país: las sequías del norte en 1980, los sismos 1985, las explosiones de Guadalajara en 1992, las inundaciones de Veracruz en 1999 y los huracanes Gilberto, Paulina y Keith, indica el documento Desastres naturales.

Los desastres, entre 1990 y 2000, también registraron un drástico incremento a nivel mundial, ya que en comparación con la década de los 70, la incidencia creció en 300 por ciento, indica el texto que servirá como base en este rubro en los foros de consulta popular de los que habrá de surgir el programa de la dependencia.

Un aspecto que destaca como punto vulnerable para el país es que está ubicado dentro del llamado cinturón de fuego, donde se presenta 80 por ciento de la actividad sísmica y volcánica a nivel mundial, además de que México se localiza en cuatro de las seis regiones que generan más ciclones en el mundo.

Anualmente se reportan en la nación entre seis y siete sismos que van de los cuatro a los seis grados en la escala de Richter. El documento cita al Centro Nacional para la Prevención de Desastes (Cenapred), el cual identifica como zona de alto riesgo el territorio que va de Jalisco a Chiapas, así como el Istmo de Tehuantepec, aunque precisa que estudios recientes señalan que en este momento la zona con mayor potencial sísmico se localiza a lo largo de la costa de Guerrero.

Al respecto el texto da cuenta que 77 por ciento de los sismos de gran magnitud ocurridos durante el siglo pasado en el país tuvieron sus epicentros a profundidades menores a 40 kilómetros, lo cual implica un alto nivel de riesgo. Diversos geólogos, abunda, han reportado que para esta década se espera un sismo de una intensidad mayor a siete grados en la escala de Richter en la ciudad de México.

Otro desastre natural que ha afectado severamente al país son los incendios. A causa de ellos, en 1998 se dañaron 850 mil hectáreas, de las cuales 198 mil eran bosques. Actualmente hay 40 millones de hectáreas deforestadas, lo cual representa 20 por ciento del territorio nacional.

Cada año, con el Plan Nacional de Forestación se recuperan 220 mil hectáreas, lo cual es apenas 0.11 por ciento del territorio nacional y no se compensa la pérdida anual de bosques, que va de las 400 mil a las 600 mil hectáreas. "Anualmente México pierde 380 mil hectáreas arboladas", precisa.

La Semarnat considera que los desastres naturales han aumentado debido a "problemas no resueltos del desarrollo; uno de ellos es la pobreza, la cual ejerce presión sobre los recursos naturales, deforestando, degradando los suelos e incrementando con ello la vulnerabilidad a fenómenos naturales".

El documento también hace referencia a los ciclones tropicales que comienzan la primera quincena de mayo, aunque resalta que septiembre es el mes de mayor incidencia. De 25 ciclones que se presentan en promedio con vientos mayores a 63 kilómetros por hora, 15 se registran en el océano Pacífico y 10 en el Atlántico.

Estos fenómenos en gran medida son la causa de las inundaciones y han consumido 70 por ciento del presupuesto del Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden) desde 1996, año en que fue establecido.

En relación con la sequía, indica que en 1999 alrededor de 400 municipios recurrieron al Fonden debido a que este fenómeno les afectó severamente y los estados más vulnerables son Chihuahua, Coahuila, Durango, Nuevo León, Baja California, Sonora, Sinaloa, Zacatecas, San Luis Potosí, Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro, Hidalgo y Tlaxcala.