MARTES Ť 8 Ť MAYO Ť 2001
Ť Siguen ataques personales
Ultima semana de campañas en Italia
REUTERS Y AFP
Italia, 7 mayo. En la última semana de campaña para las elecciones generales en Italia, los políticos intensificaron sus actividades sin dar indicios de que han escuchado los pedidos del jefe de Estado, Carlo Azeglio Ciampi, de que disminuyan los ataques de tipo personal.
El líder de centroderecha, Silvio Berlusconi, cuyo bloque de oposición encabeza los sondeos de opinión, lanzó el fin de semana una serie de críticas contra Massimo D'Alema, presidente de los Demócratas de la Izquierda, considerado el partido más numeroso en el gobierno de coalición.
Berlusconi también se burló de los políticos que fueron elegidos en la boleta de la centroderecha durante la elección más reciente y que luego cambiaron de bando a la mitad del periodo parlamentario.
Asimismo, ante las presiones de la izquierda que le reprochó que no tiene plataforma electoral, Berlusconi, presentó vía Internet su "programa de gobierno". El documento que consta de 60 páginas, ilustra las llamadas "cinco misiones para cambiar Italia" y las "cinco estrategias para mejorar la vida de los italianos".
Por su parte, el senador del movimiento xenófobo y populista Liga del Norte, Roberto Castelli, comparó este lunes al jefe de gobierno, Giuliano Amato con Adolfo Hitler. Castelli indicó: "Amato me recuerda a Hitler, cuando dio la orden de quemar París ante el avance de quienes la liberarían durante la Segunda Guerra Mundial".
Las declaraciones de Castelli fueron en respuesta a lo expresado por Amato, quien también es el presidente del consejo italiano, al calificar de "extraño" el comportamiento de la Liga del Norte hacia la construcción de Europa.
Asimismo, la ex comisaria europea Emma Bonino, presidenta del pequeño Partido Radical Italiano, anunció este lunes en la radio francesa France Inter, que planea reanudar una huelga de hambre para protestar contra las condiciones de las elecciones en Italia.
"Vuelvo a empezar una huelga de hambre con 400 personas", declaró Bonino, quien realizó una huelga de hambre y sed entre el 27 abril y 3 de mayo pasados en protesta por la "exclusión" de su partido de los principales medios de comunicación italianos.