Ť MARTES Ť 8 Ť MAYO Ť 2001

Ť Convalece en Houston

López Portillo se recupera; volvería este fin de semana

REUTERS

Houston, 7 de mayo. Tres días después de someterse a una peligrosa cirugía cardiaca, el ex presidente mexicano José López Portillo dijo el lunes sentirse "extraordinariamente bien" y su médico aseguró que podría regresar a casa "esta semana".

"Me siento extraordinaria, sorprendentemente bien", dijo el ex mandatario, de 80 años -aún débil, pero lúcido-, desde su silla de ruedas en el hospital Saint Luke de la ciudad de Houston, en el estado de Texas.

"El señor presidente tiene el corazón de león, tan fuerte como un león", dijo el doctor Robert Cervera en una conferencia de prensa. El médico formó parte del equipo de cirujanos que realizó el viernes una operación de cuatro horas para colocarle a López Portillo un sistema de "by pass" o revascularización coronaria, luego de que el ex mandatario sufrió un problema cardiaco en la ciudad de México y sus médicos le descubrieron dos arterias bloqueadas.

Debido a su avanzada edad y a una apoplejía sufrida hace seis años que lo dejó paralizado parcialmente, sus médicos lo enviaron al centro cardiaco para que se sometiera a una cirugía de "corazón latiendo", menos traumática que una cirugía normal de "by pass" porque el corazón sigue funcionando durante el procedimiento.

El ex mandatario, que gobernó México de 1976 a 1982, abandonó la unidad de cuidados intensivos del hospital el sábado y se recuperaba sin complicaciones, dijo Cervera.

"Podrá irse a casa a mediados o fines de la semana. Cuando un paciente dice sentirse aburrido y hambriento, no hay que ser egresado de Harvard para saber que las cosas van bien", explicó el especialistas en enfermedades cardiovasculares.

López Portillo dijo sentir "sorpresa de estar vivo, sorpresa de sentirme tan bien". Declaró además que el lunes había escrito el capítulo final de un libro que se llamará Ochenta, en referencia a su edad, en el cual describe la cirugía.

Durante la gestión del ex presidente, México vivió en un principio prosperidad económica, impulsada por los altos precios del petróleo.

Sin embargo, hacia el final de su mandato, la caída de los precios internacionales del crudo trajo un estancamiento económico tan severo que derivó en una devaluación del peso y la suspensión de pagos de la deuda externa.

En una acción muy polémica, López Portillo decretó la nacionalización de los bancos del país, tras acusarlos de haber "saqueado" a México mediante una supuesta especulación con dólares.

López Portillo, quien viajó a Houston acompañado de su esposa, la ex actriz Sasha Montenegro, es miembro del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que gobernó México durante 71 años hasta que el derechista Vicente Fox resultó victorioso en las elecciones presidenciales de julio de 2000.

El lunes, el ex presidente reflexionó sobre su gestión al frente del gobierno de México y dijo que había realizado "el más honesto de mis esfuerzos".

"Sí, hubiera muerto orgulloso y lo mismo vivo orgulloso", puntualizó.