MARTES Ť 8 Ť MAYO Ť 2001
Ť Envió manifiestos a reunión realizada en Panamá
La guerra, presente con la enmienda aprobada: CNI a pueblos indios
MATILDE PEREZ U.
El Congreso Nacional Indígena advirtió que la guerra "está presente" en los territorios indígenas con la aprobación de una ley que va en contra del consenso que construyeron los pueblos y comunidades con el gobierno federal en materia de derechos y cultura indígenas.
Esa alerta llegó hasta la Conferencia del Milenio de los Pueblos Indios -que se lleva a cabo en Panamá-, a la que el CNI envió copia del Manifiesto indígena que dio a conocer el 1o. de mayo en la ciudad de México, así como el Llamamiento indígena al pueblo de México, que acompañó con un comparativo entre la ley indígena aprobada por el Congreso de la Unión y la iniciativa de la Cocopa que incluía los acuerdos de San Andrés.
Al dar a conocer su palabra, los pueblos y comunidades indígenas que conforman el CNI expusieron que una vez más se pretende desconocer su existencia y dejarlos en "una historia permanente de explotación, discriminación y pobreza". Subrayaron que con la ley indígena ahora sometida a la discusión en los congresos estatales, la "clase política demostró que está empatada con los grandes intereses económicos que hoy se roban la Patria de todos (y que) no habla sino palabra falsa".
En el Llamamiento indígena -aprobado en la reunión del pasado fin de semana-, el CNI criticó a esa clase política que se mostró jubilosa después de que los indígenas y el EZLN lograron que se abrieran las puertas del Palacio de San Lázaro para que su voz y su sentir se escucharan en ese recinto. Esa clase política decía "que nuestros derechos y cultura serían puntualmente reconocidos en la Constitución y que el sentir y letra de los acuerdos de San Andrés se incorporarían a la ley primera del país".
Hoy -abundó el CNI- "sabemos que (esa clase política) no tenía el menor interés por reconocer nuestros derechos fundamentales y que es cómplice y partícipe de las políticas que destruyen nuestros pueblos y de los pocos que se roban nuestras tierras y recursos naturales".
El CNI considera que la mayor burla cometida contra los pueblos y comunidades indígenas es la llamada ley indígena, que ese organismo denomina la ley Bartlett-Cevallos-Ortega. "Es profundamente regresiva porque desconoce los derechos fundamentales de nuestros pueblos, consignados en la Constitución, así como en los tratados, pactos y convenios internacionales suscritos por el gobierno me-xicano y que tienen rango de ley suprema de la nación".
Aclaró que dicha ley incorpora en forma parcial y distorsionada conceptos y derechos consignados en el convenio 169 de la OIT y omite otros que son fundamentales, como autonomía, territorios y derecho a decidir la forma de explotación de sus recursos naturales. Por ello, "el voto de los legisladores no fue en favor de la paz y así serán juzgados".
Insistió en que la ley es "una declaración de guerra al EZLN y una burla a la demanda del CNI". Ante la posibilidad de que sea aprobada en los estados, el movimiento indígena pidió a las organizaciones civiles, sindicales y pueblos indígenas realizar actos de protesta en los 32 congresos estatales, así como llevar a cabo encuentros y movilizaciones para informar al pueblo cuáles son las diferencias sustanciales entre la iniciativa de la Cocopa y la ley aprobada.
Otros acuerdos fueron fortalecer la alianza de los pueblos indígenas con todos los sectores sociales del país para frenar una ley indígena que no responde a las exigencias planteadas, y entregar al relator especial de derechos humanos de Naciones Unidas -que estará en México del 14 al 19 del mes en curso- un amplio documento que especificará cómo se violentan los derechos de los pueblos y comunidades.
Asimismo, el CNI participará el 14 de mayo en la protesta convocada por la Coordinadora de Organizaciones Indígenas Residentes en el Distrito Federal, y entregará ese mismo día en Los Pinos las firmas recabadas en contra de la ley aprobada. Posteriormente se realizará una asamblea popular, el 16 de mayo.