DOMINGO Ť 6 Ť MAYO Ť 2001
Ť Asegura que la revista Human Reproduction sacó de contexto una frase
Niega científico de Estados Unidos haber creado bebés genéticamente modificados
Ť Explica el investigador Cohen el método de lucha contra la esterilidad
AFP
París, 5 de mayo. Rápidamente desmentida por los propios autores de la "experiencia", el anuncio este viernes de la creación de los primeros bebés genéticamente modificados hizo resurgir el fantasma de la clonación humana, más aún porque las interrogantes sobre el tema continúan sin respuesta.
Sobre el desmentido del investigador Jacques Cohen, el director científico del Instituto de Medicina, Reproductiva de St-Barnabas, en Nueva Jersey, Estados Unidos, afirmó a la Afp que no había creado bebés genéticamente modificados, contrariamente a lo que habían anunciado poco antes la radio y televisión británica BBC.
Para apoyar sus declaraciones, Cohen criticó de "inexacto" el editorial que acompaña la presentación de su trabajo en la revista Human Reproduction. "Una frase habría sido sacada de contexto", aseguró.
Pero el propio investigador es el primero en hablar de manipulación en células que modifican el patrimonio genético: "esto es para luchar contra la esterilidad".
Este método consiste en inyectar en los ovocitos (células muy jóvenes que se transforman más tarde en óvulos) una pequeña cantidad de citoplasma (el contenido de una célula con excepción de su núcleo) extraido de mujeres fértiles.
Ciertamente, los genetistas no tocaron el núcleo de la célula, que se sabe es necesario. Pero antes de esa transferencia de ovocitos, los genetistas transfirieron a las mujeres estériles mitocondrias provenientes de las donantes.
Las mitocondrias proporcionan la energía necesaria a las células. Como el núcleo de la célula, ellas contienen genes, y los niños nacidos de "manipulaciones" tienen desde este momento genes provenientes de las "donantes" y las "receptoras".
La realidad de este "transplante" fue confirmada por análisis de impresiones digitales, efectuados sobre dos recién nacidos que se "beneficiaron" de este método.
Pero nada dice que un equipo de investigadores no descubra un día que esta zona, considerada actualmente inútil, juega por el contrario un rol capital.
Considerados por Jacques Cohen como "historia antigua" esos trabajos comenzaron en 1997.