Ť Junto con sus hermanos, se dedicaba a la producción y exportación de drogas sintéticas

Detienen en Jalisco a Adán Amezcua, uno de los líderes del cártel de Colima

Ť Jaime Ladino, El Ojón, se hizo cargo de la organización criminal, informa la UEDO

GUSTAVO CASTILLO GARCIA

El narcotraficante Adán Amezcua Contreras, uno de los principales líderes del cártel de Colima, fue detenido la mañana de ayer en el poblado Ciudad de los Niños, municipio de Zapopan, Jalisco, por elementos de la Policía Judicial Federal, y recluido en el Centro Metropolitano de Readaptación Social de Guadalajara, informó José Luis Santiago Vasconcelos, titular de la Unidad Especializada contra la Delincuencia Organizada (UEDO).

Con esta detención, Jaime Ladino, El Ojón --quien fuera puesto en libertad el año pasado por jueces federales, al concederle un amparo en contra de su extradición a Estados Unidos--, se convirtió en el nuevo líder de la organización considerada como la mayor productora y exportadora de drogas sintéticas, dijo el fiscal de la Procuraduría General de la República.

No existe solicitud de extradición

Pese a que Adán Amezcua estuvo detenido bajo el nombre de José Luis Manzano, y purgó una condena de 1993 a 1995 en la cárcel de Norko, California, acusado del delito de conspiración para el tráfico de metanfetaminas, Vasconcelos aseguró que no existe solicitud de autoridades estadunidenses para que sea extraditado a ese país, como ocurre con sus hermanos Luis y Jesús Amezcua.

Vasconcelos informó en conferencia de prensa que existen ''alrededor'' de seis órdenes de aprehensión libradas por jueces federales contra dirigentes de células operativas del cártel de Colima, incluyendo la de Jaime Ladino, quien esta vez ya está acusado en México por el delito de narcotráfico.

Adán Amezcua fue detenido a las 9:40 de la mañana, ''sin violencia, ya que estaba plenamente confiado en que no tenía mayores acusaciones de la justicia federal en su contra'', indicó el titular de la UEDO.

Desde hace dos semanas, agentes federales adscritos a la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos contra la Salud (Feads) y un grupo de reacción de la Policía Judicial Federal fueron los encargados de seguirlo, y desde finales de abril ''se estuvo a punto de detenerlo, sin embargo, no hubo las circunstancias propicias para ello'', aseguró el fiscal.

Amezcua ''mantuvo un bajo perfil'' y ''cambió su fisonomía'' con relación a la que tenía en 1991, dejándose crecer la barba y engordando; sin embargo, se le encontró administrando un rancho propiedad de su hermano Jesús Amezcua, adquirido con dinero procedente del narcotráfico, con lo cual se acredita el delito previo al lavado de dinero, indicó Santiago Vasconcelos.

La acusación contra el menor de los hermanos Amezcua Contreras es por una cantidad superior a los cinco millones de pesos, por cuanto hace al valor de los inmuebles, pero además se le acreditó ante el juez el manejo de un gran capital procedente del tráfico de narcóticos, concretamente drogas sintéticas.

Adán Amezcua, según informes de la PGR y de la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA), era el encargado de las operaciones financieras del cártel de Colima, de dirigir el procesamiento de metanfetaminas en laboratorios clandestinos y de la coordinación de los traslados de efedrina en territorio nacional.

Este viernes, el juzgado sexto de distrito en materia penal, con sede en Jalisco, tomará su declaración preparatoria por la probable responsabilidad en la comisión de los delitos de uso de dinero o bienes de origen ilícito y asociación delictuosa.

Las autoridades mexicanas han establecido que ese cártel importaba ilegalmente la efedrina de Europa, India y Pakistán, llegando vía marítima a los puertos de Veracruz y Manzanillo, de donde era trasladada a laboratorios para procesar la metanfetamina y posteriormente trasladarla a Tijuana e introducirla ilegalmente a Estados Unidos para su venta y distribución.

México, primer proveedor de metanfetaminas: OGD

De acuerdo con el reporte 1999 del Observatorio Geopolítico de las Drogas (OGD), México se convirtió desde 1993 ''en el primer proveedor de metanfetaminas del mercado estadunidense, y en el primer importador de efedrina'', sustancia base para la elaboración de drogas sintéticas como cristal, crack, tachas y éxtasis, entre otras.

Según esa organización, el tráfico de metanfetaminas en México opera de la siguiente manera: vía marítima llegan las sustancias base procedentes de Hong Kong, Pekín y Tailandia a los puertos de Veracruz, Manzanillo, Tampico y Matamoros, así como por vía aérea a las ciudades de México y Guadalajara, las cuales se convierten en centros de almacenamiento y distribución hacia Nogales, Sonora; Ciudad Juárez y Ojinaga, Chihuahua; Nuevo Laredo, Tamaulipas, y Ensenada y Tijuana, Baja California.

Las ciudades donde se han descubierto laboratorios clandestinos son Honolulu, San Diego, El Paso, Albuquerque, Atlanta, Salt Lake City, Kansas, Houston y Dallas.

Los hermanos Amezcua iniciaron sus actividades en 1992, llegando a considerarse como la organización más importante del país dedicada al tráfico internacional de precursores químicos, procesamiento ilícito de drogas sintéticas y tráfico de estupefacientes, y al parecer también estaban vinculados con los hermanos Arellano Félix.

El grupo delictivo estaba encabezado por Luis Ignacio, José de Jesús y Adán Amezcua Contreras, y conformado en su mayoría por familiares. Actualmente, se presume que algunos de sus familiares han tomado el control de las actividades ilícitas que aquéllos efectuaban.

Luis Ignacio obtenía de manera ilícita precursores químicos en países de Europa y Asia, mismos que enviaba a Estados Unidos en forma directa o desde países centroamericanos como Guatemala y Costa Rica, donde mantenía importantes relaciones.

Jesús y Adán Amezcua Contreras, con el apoyo de José Antonio Osorio Cabrera (preso en Estados Unidos desde enero de 1995), compraban los precursores químicos en países como India, Alemania y China; los trasladaban haciendo uso de líneas aéreas comerciales a la ciudad de México, y de ahí utilizaban el ferrocarril o empresas de transporte privadas para trasladarlos a los estados de Jalisco y Baja California donde, una vez procesada la metanfetamina, era transportada a Estados Unidos en vehículos particulares con compartimentos ocultos.

Asimismo, dentro del territorio nacional obtenían ilícitamente cargamentos de precursores químicos o estupefacientes que, con el apoyo de otros delincuentes, eran trasladados hacia el norte del país, a los sitios donde se procesaba la droga denominada cristal (metanfetaminas).

Su área de influencia se extendía a las ciudades de Manzanillo, Colima, Guadalajara, Tuxpan, Ciudad Guzmán, Monterrey, Morelia, Aguascalientes, Tijuana y varios puntos de Estados Unidos.

José de Jesús y Luis Ignacio Amezcua Contreras, quienes fueron detenidos el 2 de junio de 1998, se encuentran actualmente en el penal de máxima seguridad de La Palma, en Almoloya de Juárez, en cumplimiento de una orden de aprehensión girada con fines de extradición, solicitada por autoridades del gobierno de Estados Unidos.

Derivado de la detención de los hermanos Amezcua, la PGR mantiene aseguradas más de cien propiedades ubicadas en diferentes estados de la República, registradas a nombre de sus primos, cuñados, sobrinos y otros familiares. También están congeladas sus cuentas bancarias.

El primero de marzo de 1999, el juez octavo de distrito en materia penal del estado de Jalisco dictó sentencia absolutoria a favor de Adán Amezcua Contreras, dentro de la causa 147/98, misma que fue confirmada el 29 de marzo del mismo año por el tercer tribunal unitario del tercer circuito.

Por esta última sentencia del magistrado Nicandro Martínez López, existe librada orden de aprehensión contra éste por delitos contra la administración de justicia. Actualmente, este ex magistrado está evadido de la acción de la justicia.