MIERCOLES Ť 2 Ť MAYO Ť 2001
Ť Estudio para América Latina de 1989 a 1998
BM: subió 82% el número de mexicanos en pobreza extrema
Ť Pasaron de 5.2 a 9.5 millones las personas que no pueden satisfacer sus necesidades diarias de alimentos básicos, dice
JIM CASON Y DAVID BROOKS CORRESPONSALES
Washington, 1o. de mayo. En América Latina, una de cada tres personas vive en la pobreza, y una nueva investigación de un equipo de economistas del Banco Mundial halló que aunque la pobreza es menor en México que en otras naciones de la región, tanto el porcentaje como el número de individuos que viven en esa condición en el país se incrementó en los años 90.
La investigación Pobreza en América Latina: tendencias y determinantes encuentra que el número absoluto de mexicanos que viven en la pobreza se incrementó más de 38 por ciento durante la última década. Y cuando los economistas intentaron medir el número de personas en pobreza extrema -que no cuentan con suficientes recursos para satisfacer sus necesidades básicas de alimento cada día- hallaron que el porcentaje se había elevado 82 por ciento en ese mismo periodo.
Pero los economistas que elaboraron el estudio advirtieron a La Jornada que los resultados fueron calculados como parte de un intento para comparar tendencias de pobreza en América Latina, por lo que no necesariamente son tan precisos como otras evaluaciones nacionales.
No obstante, uno de los autores del informe indicó que la investigación tenía la intención de superar las deficiencias de las formas en que se ha medido tradicionalmente la pobreza global, que utilizan para tal definición a personas con ingresos menores de uno y dos dólares diarios, que no necesariamente rinden datos precisos para América Latina (en el pasado, tales formas de medir hallaron que entre 32 y 40 millones de mexicanos vivían en pobreza con menos de dos dólares diarios).
Para preparar esta investigación, el equipo de economistas del Banco Mundial, encabezado por Quentin Wodon, realizó una evaluación comparativa de las tendencias de la pobreza en el conti
nente, que inició un cálculo para determinar el costo por individuo en cada país examinado a fin de obtener sus necesidades de alimentación básica (aunque el tipo de comida podría ser diferente por nación, se calculó en 2 mil 200 calorías diarias por persona).
Los economistas del BM definieron a los que viven en "pobreza extrema" como aquellos que no pueden obtener este monto de alimento básico, y a los que viven en la "pobreza" como aquellos que no tienen la posibilidad de adquirirlo más otras necesidades básicas (una suma financiera igual a dos veces el nivel de pobreza alimenticia en áreas urbanas, y de 1.75 veces en las zonas rurales).
Utilizando estas definiciones, los economistas del Banco Mundial concluyen en su informe que entre 1989 y 1998 el número de personas en pobreza en México (aquellos que no tenían suficientes recursos para adquirir alimentación básica, más otras necesidades esenciales) se incrementó de 19 millones a 26.3 millones. Más significativo: en este mismo periodo, el porcentaje de la población bajo pobreza se incrementó de 23.4 a 27.6 por ciento.
Los economistas también informaron que el número de personas que viven en pobreza extrema en México (aquellos que ni siquiera podían cubrir sus necesidades de alimentación básica) se incrementó de 5.2 millones a 9.5 millones entre 1989 y 1998.
Otros economistas independientes consultados cuestionaron si estos números -que son bastante menores a otros cálculos de la pobreza- representan de forma precisa las dimensiones reales del problema en México. Pero aun si esto es cierto, reconocen que el factor más significativo de estos cálculos es el dramático incremento de las personas definidas como viviendo bajo "pobreza extrema".
Problema agudo en zonas rurales
Independientemente de la forma de medir empleada y de las imperfecciones de estos datos, las cifras provisionales ofrecidas en esta investigación confirman que la pobreza en México ha empeorado en la última década. Como podría esperarse, el problema es más serio en las zonas rurales, donde 55 por ciento de la población vivía en pobreza en 1998, y menos marcada en zonas urbanas, donde 15 por ciento de la población se define como pobre.
Al mismo tiempo, los economistas del Banco Mundial indican que los niveles de pobreza en México son mucho menores que en países pequeños de la región, como Guatemala, Honduras, Bolivia y Nicaragua. Las tasas más altas de pobreza, según esta investigación, se encuentran en Colombia, donde 66 por ciento de la población está clasificada como pobre, contra 35 por ciento en Brasil; y en Chile las tasas son parecidas a las de México.
Pero los economistas del Banco Mundial señalan que también hay algunas buenas noticias: mientras que la pobreza se ha incrementado en México, el porcentaje de la población que vive en la pobreza en gran parte de América Latina disminuyó durante la última década, y los niveles de pobreza en la región han recuperado el mismo punto que habían registrado en 1986. Pero aunque el porcentaje de los que viven en pobreza ha bajado, el número absoluto de individuos que viven en esta condición se incrementó a 37 millones en América Latina, como resultado del crecimiento de población entre 1986 y 1998.
En 1998 existían 179 millones de pobres en América Latina, lo que representaba cerca de 36 por ciento de la población total. De este número, unos 89 millones, o 18 por ciento, estaban clasificados como tan pobres que no contaban con los recursos suficientes para obtener alimentación básica. "A pesar de los avances logrados en los 90, los porcentajes de la población que vive en pobreza y en pobreza extrema en 1998 siguen siendo altos, y la región apenas ha regresado a los niveles de pobreza de 1986", concluyen los autores. "Si estas proyecciones para medir la pobreza se elaboran para el 2000, habría un avance muy limitado desde 1998".