SABADO Ť 28 Ť ABRIL Ť 2001

Ť Con el marco jurídico actual no tienen posibilidad de hacerlo, explica Jaimes Olivares

Acceso de iglesias a medios, sólo con reforma constitucional

ALONSO URRUTIA

El director de Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobernación, Genaro Jaimes Olivares, sostuvo que el acceso de las iglesias a los medios de comunicación sólo se podrá lograr con una reforma constitucional que indique que todas las agrupaciones religiosas están en posibilidad de hacerlo.

En ese hipotético caso, aclaró, el Estado no podría promover los medios de estas iglesias, pues "rompería el balance de un Estado laico".

Rodrigo Guerra, director del Departamento de Estudios de la Comisión Episcopal de Pastoral Social, demandó que se promuevan reformas al artículo 24 constitucional con el fin de que se reconozca de manera explícita que toda persona goza del derecho inalienable al libre credo, sin más límites que los establecidos en la Constitución.

En la continuación de los foros sobre la Reforma Integral de la Constitución, con los temas libertad de expresión y libertad religiosa, Patricia Olamendi, de la Comisión Ciudadana para la Lucha contra la Discriminación Jurídica, pugnó por que el Estado sea el garante de la libertad de expresión, porque la sola referencia constitucional a este derecho no es sinónimo de que pueda ejercerse libremente.

En su oportunidad, el director del Instituto de Estudios Históricos de la Revolución Mexicana y coordinador de los foros, Francisco Valdés Ugarte, manifestó que en materia religiosa se dio un paso fundamental con las reformas de 1992 al artículo 130 constitucional; sin embargo, aún restan algunas ambigüedades en los preceptos que regulan esta materia.

Jaimes Olivares dijo que con el marco jurídico actual, las iglesias no tienen posibilidad de acceder a los medios de comunicación. Subrayó que ha sido la laicidad del Estado la que ha permitido la promoción de la libertad religiosa.

Si el Estado respeta la libertad religiosa de los individuos y los grupos, no puede legítimamente forzar el sentimiento religioso, ya que el propio principio de libertad religiosa no entraña sólo reconocimiento de zona de inmunidad, sino de protección y fomento; entonces la laicidad no puede ni debe significar hostilidad, indiferencia o pasividad hacia los sentimientos religiosos de los ciudadanos.

Respecto de la libertad de expresión, Margarita Labarca Goddard, de la fundación panista Rafael Hernández Preciado, dijo que ese derecho está limitado a las personas que tienen el poder, pues sólo los partidos políticos tienen posibilidades de acceder a tiempos oficiales para transmitir sus mensajes, situación que no ocurre con el resto de los ciudadanos.

Propuso cambios a fin de que organizaciones sociales representativas puedan tener acceso a los tiempos oficiales, con lo que se impulsaría una política real de libertad de expresión.

Eduardo Ortiz Castro, de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, alertó acerca del riesgo de que los medios de comunicación impongan su forma de ver las cosas.