Ť Dice que llevará "muchas semanas analizar" el tema a los legisladores del tricolor
Descarta Jackson periodo extraordinario en el Senado para la reforma hacendaria de Fox
Ť El PRI pondrá oídos sordos a la propaganda del gobierno y a la necedad del Presidente, advierte
ANDREA BECERRIL
El coordinador de los senadores del PRI, Enrique Jackson Ramírez, cerró anoche la posibilidad de que se convoque a un periodo extraordinario de sesiones para discutir la reforma hacendaria y fiscal del presidente Fox, que podría irse hasta septiembre, cuando reinicia actividades ordinarias el Congreso de la Unión.
"Es un asunto muy delicado, que a los legisladores del tricolor les llevará "muchas semanas analizar", precisó en conferencia de prensa, en la que aclaró que no permitirán presión del Ejecutivo y harán una amplia consulta entre los sectores productivos del país, a fin de estructurar una contrapropuesta que "corrija los excesos" y desigualdades del proyecto fiscal del Ejecutivo.
La posición de los legisladores del PRI, insistió, "es irreductible". "No aceptamos ni aceptaremos" que se graven con IVA medicinas y alimentos, y en general, "no estamos de acuerdo" con una propuesta "que sólo busca sacar el dinero de la bolsa de los que menos tienen y de los asalariados que conforman los sectores medios de la población".
Advirtió que pondrán "oídos sordos" al despliegue publicitario del gobierno que urge a legislar la llamada nueva hacienda pública, pues "ni la necedad" del presidente Fox "ni su enfadosa y costosa propaganda, ni su engaño al manipular y deformar la realidad del país y menos sus demagogos dichos, podrán contra el voto de los senadores priístas".
Los tiempos de los legisladores, insistió, no son los del Ejecutivo. "Tampoco coincidimos respecto de a quién debemos servir". Para los priístas, dijo, no hay confusión. "Su posición es no a las cargas desmedidas y no al trato preferente a unos cuantos".
Precisó que "con toda dedicación" los senadores del PRI "estamos revisando las consecuencias de la reforma que presenta el Ejecutivo, para construir alternativas que corrijan sus excesos".
A pregunta expresa, señaló que no será posible convocar a un periodo extraordinario, como lo han sugerido las autoridades hacendarias, porque se trata de un asunto muy delicado, que llevará varias semanas discutir. "Estamos hablando de treinta y tantas iniciativas que conforman el paquete fiscal y hacendario".
Por eso, añadió, han dicho que no tienen prisa. "Si desde la noche del pasado 2 de julio sabían que iban a ser gobierno, debieron presentar antes su propuesta, pero tardaron ocho meses en elaborarla y presentarla y no vamos a aceptar ahora que nos presionen".
Los legisladores del PRI "no estamos al servicio del Ejecutivo, sino de la población" y por ello, "cuando estemos listos, cuando hayamos avanzado, podremos hablar de tiempos".
Precisó que el grupo parlamentario del PRI trabaja en una contrapropuesta de reforma hacendaria viable y verdaderamente integral, "que va más allá del incremento de los ingresos para el gobierno", una reforma equitativa y justa "que simplifique los trámites, para que pagar impuestos sea una cuestión sencilla y transparente, que genere certidumbre a los ciudadanos, que elimine cualquier vestigio de discrecionalidad o abuso de la autoridad fiscal".
Delineó parte de la contrapropuesta fiscal que estructuran los priístas, la que, dijo, incluye medidas para ampliar la base de contribuyentes, conforme a las posibilidades de todos, un nuevo régimen tributario para Pemex, la creación de un ombudsman fiscal ?que permita defenderse a los contribuyentes de excesos de las autoridades financieras? y una política a partir de mecanismos eficientes de lucha contra la evasión impositiva y el contrabando.
Con tan sólo la aplicación de estas últimas medidas, para que el gobierno sea eficaz en el cobro de impuestos, "se podrían generar recursos tan importantes como las metas de recaudación propuestas por Fox".
Al respecto, Jackson señaló que "es una desvergüenza" de las autoridades hacendarias reconocer que cuatro de cada diez pesos del IVA no llegan a las arcas, pues se quedan en el camino. "Mucho ayudaría entonces que el gobierno actual fuera mucho más eficaz y sólo dejara de pensar en seguir cobrando a los que ya pagan".
En síntesis, precisó, la propuesta priísta es en torno a una reforma "que evite el camino fácil pretendido por Fox", quien quiere "gravar el trabajo y el gasto familiar y no las utilidades y la especulación".
Los senadores del PRI, conjuntamente con sus compañeros diputados, no permitirán que pase en el Congreso "nada que afecte a los que menos tienen y a aquellos que apenas ganan para vivir" .