MIERCOLES Ť 25 Ť ABRIL Ť 2001

Ť Insisten en la huelga si no los liquidan según su contrato

Obreros de Goodyear discuten destino de su millonario patrimonio sindical

FABIOLA MARTINEZ

El cierre definitivo de la planta en México de Goodyear Oxo -decretado por la empresa el pasado 6 de abril- arroja a los mil 357 trabajadores no sólo al desempleo, sino a definir el destino del millonario patrimonio de su sindicato, controlado desde hace décadas por líderes impulsados por la CTM y el PRI.

Con los altos salarios de los obreros de esta productora de llantas asentada en Tultitlán, estado de México, fue posible ampliar un liderazgo sindical y político en la región y amasar una serie de bienes, cuyo destino aún no se discute.

En ese patrimonio se encuentran dos centros vacacionales: el Artículo 123, mejor conocido como Las Adelitas, ubicado en Tequisquiapan, Querétaro, y el Fidel Velázquez, asentado en Cuautitlán. En estos predios se emplean alrededor de 200 hectáreas para el cultivo de diversos granos y frutas.

El Sindicato de Trabajadores de Goodyear cuenta además con una extensa propiedad denominada El Ciervo, en la que, según versiones de los dirigentes sindicales, se encuentra una mina de ópalo aún sin explotar. Respecto a los inmuebles, cuentan con un edificio en Cuautitlán que posee un amplio salón para eventos sociales, y otro más en Tultitlán, para oficinas.

Gonzalo Ugalde, actual líder del gremio referido, señaló que tendrá que someterse a discusión en la asamblea, en donde persiste una disidencia de ex dirigentes, el destino final de los recursos del sindicato, amasados desde tiempos del fallecido Sergio Pérez Tovar, también ex secretario de Organización de la CTM, y a quien se le consideró brazo derecho del extinto jerarca de esa confederación, Fidel Velázquez Sánchez.

La tarde de este jueves vence el emplazamiento a huelga que encabezan los trabajadores de Goodyear como única alternativa jurídica para lograr liquidaciones con base en salario integrado y los beneficios del contrato ley de la industria hulera, así como de los convenios de "prestaciones" firmados desde la década de los 50 entre sindicato y empresa. En la dirección de Conciliadores de la Secretaría del Trabajo, el representante jurídico de la llantera, Jorge A. de Regil, advirtió a los sindicalistas que no hay marcha atrás en el cierre de la planta, por una decisión "irrevocable" de la matriz en Estados Unidos.

De acuerdo con la versión de Ugalde, la empresa informó que el mercado nacional se cubrirá con importaciones provenientes de Canadá y Estados Unidos, porque a pesar de la distancia para el traslado de miles de llantas diariamente, "según ellos les sale más económico que atender nuestro contrato ley".

Hasta ayer, previo a la asamblea general con los trabajadores, trascendió que el sindicato podría firmar un convenio de terminación de relación laboral, en calidad de "retiro voluntario" de los más de mil trabajadores sindicalizados, con el fin de evitar el pago de impuestos y cobrar los finiquitos con base en el salario base, "más premios e incentivos", cuyo promedio pasaría de 583 a 850 pesos.

Ayer no hubo arreglo que evite la posibilidad de una huelga, particularmente porque el sindicato pide liquidaciones que incluyan cuatro meses de salario.