DOMINGO Ť 22 Ť ABRIL Ť 2001
Ť Era el banco encargado de pagar la nómina
Cancela la PGR su relación con Citibank a partir del día 30
Ť "No cuenta con la capacidad operativa suficiente", explica
GUSTAVO CASTILLO GARCIA
La Procuraduría General de la República (PGR) terminará este 30 de abril su relación con el Citibank. Ese día la institución bancaria estadunidense pagará por última ocasión el salario de los empleados de la dependencia que encabeza el general Rafael Macedo de la Concha.
La causa, aseguró Francisco Germán Gallegos Gutiérrez, oficial mayor de la PGR, es que el Citibank no cuenta con la capacidad operativa suficiente en el país para cubrir los requerimientos de pago de los empleados de la procuraduría.
Sin embargo, la institución crediticia estadunidense posee mala fama, pues ha sido señalada en diversas ocasiones de lavar dinero procedente del narcotráfico, especialmente de cárteles como el de Juárez o el de Cali.
Fue involucrada como una de las instituciones estadunidenses a través de las cuales la organización de Amado Carrillo, utilizando bancos mexicanos como Serfin para puentear las transacciones, lavó miles de dólares mediante transferencias financieras que fueron puestas al descubierto por autoridades del vecino país dentro de la llamada Operación Casablanca.
El Citibank también ha sido utilizado por algunos personajes de la política mexicana que luego se han visto involucrados en diversos actos ilícitos, tal es el caso de Raúl Salinas de Gortari.
Otro ejemplo son las cajas de seguridad que se localizaron en una sucursal de Citibank México, a nombre del ex oficial mayor de la PGR Juan Manuel Izábal Villicaña, y en las cuales se encontraron más de un millón 300 mil dólares.
Izábal Villicaña, según la versión oficial, se suicidó de un tiro en la cabeza el 8 de marzo de 2000. La PGR nunca pudo descubrir el origen del dinero, pese a que en una de las cartas póstumas se afirmaba que eran recursos de los cuales su procedencia era difícil de explicar.
En este caso, para el banco, la cuenta había sido abierta por un alto funcionario de la PGR. Sólo investigaron de qué se trataba y dieron parte a las autoridades cuando tuvieron que mudarse del inmueble que ocupaban, e Izábal no recogió en tiempo lo que había depositado en las cajas de seguridad.
Pocos pueden establecer desde cuándo la PGR mantiene una relación con el Citibank, pero ya en la gestión de Jorge Madrazo Cuéllar existía un cajero de esa institución dentro de las propias instalaciones de la dependencia.
Pero desde el 19 de abril, la Oficialía Mayor y la Dirección General de Recursos Humanos elaboraron la circular número DP884/2001, en la que se establece que los empleados de la PGR tendrán como fecha límite el 9 de mayo para retirar el saldo total de sus tarjetas de débito otorgadas por el Citibank, ya que la institución cancelará todas las cuentas de este tipo el día 10, y aquellas que aún tuvieran saldo, el banco se encargará de realizar un reembolso a la cuenta de remuneraciones federales y se entregará una relación por empleado, cuenta y saldo, para que la propia PGR lo pague a sus empleados.
Por lo que se refiere a quienes poseen cuentas maestras, el 20 de abril se inhabilitarán las tarjetas de crédito y a partir del día 20, los empleados de la PGR sólo podrán efectuar retiros mediante cheque, y además, entre el 2 y el 15 de mayo, deberán presentarse a cancelar sus cuentas "o de lo contrario Citibank lo hará de acuerdo a sus procedimientos internos".
El oficio firmado por Sergio Valdés Cruz -del cual La Jornada posee copia- no establece cuál será el nuevo banco para pagar la nómina de la PGR, pero según dijo el oficial mayor, el encargado será Bital.