DOMINGO Ť 22 Ť ABRIL Ť 2001

Ť Marco Antonio Peyrot, en el 87 aniversario de la defensa del puerto de Veracruz

El Pacífico, principal ruta de ingreso de drogas

Ť "En la zona del Caribe no hemos encontrado nada", dice el secretario de Marina

JESUS ARANDA ENVIADO

Anton Lizardo, Ver., 21 de abril. La ruta del oceáno Pacífico se ha convertido en el mayor paso de droga que ingresa al país, dijo el secretario de Marina, almirante Marco Antonio Peyrot, quien explicó que, tanto por los decomisos de cocaína (más de siete toneladas y media) como por reportes de inteligencia, es claro que la frecuencia en el paso de estupefacientes por esa zona se ha incrementado; a diferencia de la zona del Caribe, en donde "no hemos encontrado nada".

Peyrot reconoció que pese a los fuertes decomisos de droga logrados en operaciones frente a las costas de Michoacán y Colima (que representan 56 por ciento de toda la cocaína incautada en el país), "el problema por resolver es la ecuación de la información", ya que mientras mejores fuentes tengamos mayores medios pondremos en los lugares y momentos precisos para interceptar droga en el mar; pero "si no hay buena información ni buena inteligencia, estamos buscando un poco a ciegas".

Aun cuando están pendientes de establecerse nuevos mecanismos de cooperación antinarcóticos con Estados Unidos, para la Armada queda inamovible la negativa para que naves del vecino país lleven a cabo "persecuciones en caliente" de barcos sospechosos que huyan de su país y se internen en las 12 millas del mar patrimonial.

Tras encabezar el acto conmemorativo del 87 aniversario de la defensa del puerto de Veracruz, y la jura de bandera de cadetes de nuevo ingreso de la Heroica Escuela Naval, Peyrot reiteró con relación a los 12 tripulantes del barco Tolteca I, que fueron dejados libres por el Ministerio Público Federal (MPF), que la Armada consignó en su momento a dicha tripulación, porque "sí encontramos huellas e indicios" de cocaína en la embarcación, y por eso se pusieron a disposición de la autoridad, aunque dejó en claro que la Armada no es una agencia de inteligencia ni de investigación antinarcóticos, sino que su labor es la de coadyuvar con la PGR en esa labor.

Explicó que después de 10 días de realizar una intensa "búsqueda destructiva" en la nave, de cortar y romper instalaciones del buque -que estuvo anclado en el puerto de Manzanillo-, fue que se detectaron las casi cuatro toneladas de cocaína a bordo; sin embargo, debido a que los tripulantes ya habían sido detenidos y que el MPF consideró que no había elementos para consignar, fue que quedaron libres.

-ƑDe quién fue la culpa?- se le preguntó en la entrevista que tuvo lugar en la sede de la Heroica Escuela Naval.

-Yo creo que de nadie, porque nosotros tuvimos sospechas, detuvimos la embarcación (en altamar), consignamos a la tripulación por sospechosa. Después, el MPF determinó que no había elementos suficientes para consignarlos....

La droga, añadió, estaba muy oculta; y si no hubiésemos tenido la determinación de buscar, no habríamos encontrado nada.

Conciliador, aseguró el almirante que "no existen pugnas o fricciones" entre la PGR y la Armada. "No somos rivales; somos un equipo unido que lucha por el bien de México", indicó.

Por otra parte, Peyrot dijo que aún no se ha concretado el acuerdo de colaboración entre la Armada y la Policía Federal Preventiva (PFP) para que cerca de cinco mil infantes de marina pasen "voluntariamente" a la agrupación federal. Sin embargo, dejó en claro que es obligación del Ejército y de la Armada "reforzar a las instituciones" -en este caso la PFP-, en razón de que la dependencia que encabeza Alejandro Gertz Manero "requiere de gente capacitada y el Ejército nacional y la Armada tienen que apoyar a la PFP a que se constituya, mientras ella misma forma sus propios cuerpos y a su personal.

Respecto a la importancia del Pacífico como ruta para que ingrese droga al territorio nacional, Peyrot comentó que se han realizado decomisos en el área, en una ubicación que va desde 300 millas náuticas (750 kilómetros de la costa) hasta 100 millas náuticas (180 kilómetros) de la playa, mientras que en el Caribe no se ha encontrado nada. Afirmó que esto se debe a que en el Caribe "hay mucha presencia de todas las fuerzas federales". En todo caso, dijo, "soy del pensamiento de que se está dando más por el Pacífico, por los decomisos y reportes que son más frecuentes".

Cabe señalar que el almirante no desmintió -en sus respuestas- preguntas concretas en las que se aseguró que en la zona del istmo de Tehuantepec se han intensificado las acciones de los narcos. Comentó que en las próximas semanas se reunirán "las agencias federales" de México y Estados Unidos que combaten al narcotráfico, para sentar las bases de entendimiento y colaboración futura en su ámbito de acción.

Previamente, en la ceremonia del 87 aniversario de la defensa de Veracruz contra los invasores de Estados Unidos -donde la ausencia del presidente Vicente Fox rompió con una tradición "casi sagrada" de los mandatarios del país, de asistir a ésta-, el almirante recordó, sin embargo, el sello del nuevo gobierno: "Tenemos un gobierno de calidad y somos un pueblo orgulloso de sus instituciones", indicó.

En su discurso, en el que también comentó que la nación siente orgullo "de sus montañas, volcanes, valles, selvas, playas y sus mujeres...", aunque de inmediato corrigió "mares", Peyrot sostuvo que los marinos están comprometidos con el reto de ser "participantes activos" en el proceso de forjar el México que todos anhelamos, "garantizándole la solidez de una Armada digna y leal, dedicada a preservar la soberanía de México a lo largo de sus litorales".

Durante el acto -al que tampoco asistió el secretario de la Defensa Nacional, general Ricardo Clemente Vega García-, Peyrot entregó los "espadines" y tomó la jura de bandera a 174 integrantes de la generación 2000-2006, ante la presencia del gobernador de la entidad y funcionarios federales y locales. Los primeros que se presentaron en menor número que en años anteriores, cuando sí asiste el presidente de la República como ocurrió de manera consecutiva al menos en los últimos tres sexenios.