SABADO Ť 21 Ť ABRIL Ť 2001
Ť Asegura De la Rúa desde Canadá que no habrá dolarización de la economía
Repudio generalizado a recomendación de Menem de convertir pesos en dólares
Ť Considera que es una devaluación la iniciativa de incorporar el euro a la convertibilidad
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 20 de abril. Todos los sectores políticos, entre ellos el Partido Justicialista (pe-ronista), repudiaron una recomendación del ex presidente Carlos Saúl Menem para que los argentinos que "tienen un peso en el bolsillo lo conviertan en dólar lo más rápido posible", al considerar que la iniciativa de incorporar el euro a la convertibilidad oculta una devaluación.
El presidente Fernando de la Rúa respondió de inmediato desde Canadá y llamó a los argentinos a "derrocar a los enemigos que quieren sembrar confusión, al tiempo que aseguró que no habrá devaluación del peso ni dolarización de la economía.
Esto coincidió con una fuerte presión de sectores externos y rumores de una posible renuncia del ministro de Economía, Do-mingo Cavallo, lo que fue desmentido hoy por De la Rúa, originados ante el desplome de la bolsa, que llevó el "riesgo país" a superar los mil puntos.
A este polvorín político-económico se agregó una fuerte tensión con Brasil por expresiones de Cavallo durante una reciente estadía en ese país, al señalar que "el arancel común es una payasada".
Lo anterior añadió incertidumbre en tor-no al Mercado Común del Sur (Mercosur) y causó reacciones y estupor oficiales y privadas en el país vecino.
Pero este día, el presidentes argentino y su homólogo brasileño, Fernando Henrique Cardoso, expresaron en Quebec su voluntad de reafirmar el Mercosur para unidos negociar el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
Los mandatarios, que se encontraron en el marco de la Tercera Cumbre de las Américas, dieron por superado el desencuentro que causó Cavallo al declarar, esta semana, que Argentina debería negociar acuerdos de libre comercio con Estados Unidos y la Unión Europea.
En tanto, la ola de noticias, interpretaciones y rumores puso a Argentina ante dos días de zozobra, y si ayer se hablaba de "un jueves negro" hoy también fue considerado un viernes "de alto voltaje".
Apoyo estadunidense
No obstante, Cavallo recibió el apoyo del secretario del Tesoro de Estados Unidos, Paul O'Neill, quien expresó su confianza en que Argentina pueda resolver sus problemas financieros con la gestión del nuevo ministro de Economía.
Cavallo, por su parte, aseguró que los sectores internos y externos que hablan de una devaluación encubierta en su propuesta de extender a otra moneda la convertibilidad --y que fue apoyada en Londres-- "no entienden nada".
Pero la gran revuelta política se dio en torno a las declaraciones de Menem, quien habló desde La Rioja para argumentar que había que comprar dólares, lo que aumentó la zozobra local.
El presidente De la Rúa aseguró de inmediato que no habrá devaluación del peso ni dolarización de la economía, y exhortó a los argentinos a que prevalezca la responsabilidad en momentos de creciente nerviosismo de los mercados.
Para los analistas la conducta de Menem estuvo asociada, por una parte a sus amigos externos, "duchos en golpes de mercado" y, por la otra, a la necesidad de ubicar otro tema en el escenario cuando la justicia toca a su puerta en la causa judicial que investiga la venta ilegal de armas a Croacia y Ecuador, durante su gobierno.
El proceso en este caso avanzó y amenaza con llevar a prisión a varios ex ministro y al propio ex presidente, después de que Luis Sarlenga, ex interventor de Fabricaciones Militares, decidiera dejar de ser el "chivo expiatorio" en esta causa judicial y habló abriendo las puertas de la cárcel para buena parte del gabinete menemista.
Así, el abogado Ricardo Monner Sanz, denunciante por la venta ilegal de armas, entre 1991 y 1995, reclamó hoy las indagatorias de Menem y Cavallo, quien ocupaba en mismo cargo en ese entonces.
De la Rúa enfrenta todos estos focos rojos de conflicto, mientras se agudizan las reacciones de los sectores políticos y sociales argentinos con respecto al voto contra Cuba en el Comité de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas.
El Comité Nacional de su propio partido, la Unión Cívica Radical (UCR), "lamentó" que se haya reiterado el error del año pasado de votar contra Cuba y se haya decidido mantener la política que durante 10 años caracterizó al gobierno de Menem.