VIERNES Ť 20 Ť ABRIL Ť 2001

Ť Debió comunicarse sobre el informe de la FBI para tomar medidas precautorias, dice

Reprocha procurador de Chihuahua que PGR no haya advertido sobre atentado a Martínez

Ť La dependencia federal podría tener responsabilidad en el intento de homicidio al mandatario

JUAN ANTONIO ZUÑIGA ENVIADO

Chihuahua, Chih., 19 de abril. El procurador de esta entidad, Arturo González Rascón, señaló que la Procuraduría General de la República no advirtió a tiempo a las autoridades estatales sobre el atentado que sufrió el gobernador Patricio Martínez García el 17 de enero, y rechazó cualquier posibilidad para que ésta atraiga el caso.

Apuntó: "Es indiscutible que si hay alguna información de inteligencia de la FBI, que si esa información, de acuerdo con la ley y dentro de las relaciones internacionales existentes, la recibe PGR, debió de haberse comunicado de inmediato a la autoridad estatal para tomar medidas de prevención, y además de haberse tomado esa medida, debió adicionalmente ver con qué elementos se aseguraba y protegía la institución gubernamental de Chihuahua. Eso no dejaremos de señalarlo, insistirlo y protestarlo".

Informó que hasta ahora el único funcionario que ha entablado comunicación con la Procuraduría estatal, después de que trascendió el informe que puso en conocimiento de la PGR la FBI, ha sido el subprocurador B, Jorge Campos Murillo, con quien ?dijo? ''tocamos este tema y me confirmó la existencia de dicho aviso".

Entrevistado en la supervisión de los trabajos del complejo de Procuración de Justicia y Seguridad Pública en esta capital, González Rascón consideró que la actitud de la PGR frente a este caso "es una falta de sensibilidad increíble", y aunque se trate de una situación del ámbito federal, dejó entrever que "pudiera haber responsabilidad" por omisión o complicidad.

--¿Qué hay sobre el informe de la FBI respecto del atentado al gobernador?

--No tengo más conocimiento oficial que el de una llamada del subprocurador Campos Murillo, en donde me manifestó algo semejante; hay adicionalmente una versión de medios en la que se habla que el 15 de enero se recibió un primer aviso, el cual no fue muy explícito y lamentablemente no motivó ninguna acción. Y luego ya la versión del 30 de enero.

--¿Ustedes confiarían en que estas investigaciones las realice correctamente la PGR de atraer el caso?

--Definitivamente no, hemos insistido, hemos pedido, hemos exigido que eso no se realice. Es indiscutible que en este caso se requiere que se haga la investigación totalmente en el área estatal, lo cual no impide que la PGR nos aporte y nos permita la información de inteligencia que tenga que ver con este asunto y con el crimen organizado, la cual puede estar vinculada con la acción que afectó al gobernador.

--¿Se ha incrementado la seguridad para el gobernador?

--Claro que sí; justamente es parte de la información que por elemental seguridad no se maneja.

--¿Cuándo le avisaron de esta información de inteligencia de la FBI?

--El conocimiento que yo tengo es de los medios; luego, ya después de las publicaciones, estuvo una llamada telefónica del subprocurador Jorge Campos Murillo, donde tocamos este tema y me confirmó la existencia de dicho aviso.

--¿Qué pensó en ese momento? ¿Por qué no le avisó con tiempo?

--Que era una falta de sensibilidad increíble, que cómo es posible que la persona que puede recibir la afectación, no reciba de inmediato la información de algo que le puede afectar, y cómo es posible que tampoco nosotros la recibamos.

--¿Cómo califica eso?

--Mire, no tiene calificativo. Creo que el hecho está consignado, está aceptado, y el más elemental sentido común nos indica que esto no se vale.

--¿Pero puede presumirse complicidad u omisión?

--Pudiera haber responsabilidad, claro está, pero queda dentro del área federal.

--¿No podría investigarse la PGR a sí misma?

--Sí, claro que puede.

--¿Está abierta la posibilidad?

--Yo creo que sí.

--¿Cómo está el asunto con el cártel de Juárez?

--El problema del narcotráfico en México es que, cuando menos por lo que se refiere a la experiencia que nosotros tenemos en el estado, no hay una investigación delictiva que esté poniendo tras las rejas a las organizaciones actuantes.