VIERNES Ť 20 Ť ABRIL Ť 2001

Ť Ambos países firmaron carta de intención para apoyar desarrollo social y humano

Canadá da espaldarazo a iniciativa fiscal de Fox

Ť El gobierno de Chrètien mantiene en marcha un sistema hacendario como el propuesto

JUAN MANUEL VENEGAS ENVIADO

Ottawa, 19 de abril. El presidente Vicente Fox Quesada hizo hoy, desde esta ciudad, una férrea defensa de la iniciativa de reforma hacendaria que se discute en México, y logró, incluso, que el gobierno canadiense se pronunciara a su favor, pues contiene los elementos aplicables a una "economía moderna".

En tal sentido, ambos gobiernos firmaron una "carta de intención", a partir de la cual se estrecharán la cooperación y el intercambio en materia fiscal y nuevos modelos de desarrollo social y humano, en el entendido de que Canadá cuenta con un sistema recaudatorio y compensatorio "muy similar" al que plantea el proyecto foxista.

senado_1"Para cualquier persona de buen juicio" debe quedar claro que "lo que estamos haciendo es lo correcto; que lo que estamos haciendo es precisamente no gravar a los pobres, pero sí recoger impuestos entre las familias que tienen la capacidad de invertir en su país. Esos recursos se invertirán directamente en los pobres, pues hemos encontrado una fórmula que nos permite distribuir ingreso y generar presupuesto adicional", subrayó el mandatario mexicano.

En entrevista, luego de una reunión que por la tarde sostuvo con organizaciones no gubernamentales (ONG), Fox Quesada explicó el respaldo que busca con la carta de intención que se firmó con la administración de Jean Chrètien: "el gobierno de Canadá no quiso gravar a las familias de menos ingresos; nosotros, coincidentemente, no queremos gravar a las familias pobres ni de menos ingresos en el país. ¡Qué bueno que exista este mecanismo en Canadá, porque eso nos permitirá entender mejor en México que sí es posible tener un sistema fiscal de esta manera, donde se eliminan las tasas cero!".

Según dijo, la reforma hacendaria que propuso al Congreso permitirá acabar con los rezagos del país y llegar a tener "dentro de los próximos seis años" un sistema de salud verdaderamente "competitivo, de excelencia, de calidad para las clases medias y los pobres del país, para que no tengan que comprar medicinas ni pagar servicios de doctor y de consulta caros".

Con todo esto, agregó, "nuestro reto es construir el mejor sistema de educación ¡del mundo! Y en los próximos años, con los recursos de esta reforma fiscal, construir el mejor sistema de salud ¡del mundo!".

Fox recalcó entonces que el "único propósito" de la reforma es "beneficiar a los pobres, erradicar la pobreza en el país y llevar oportunidades a las familias pobres y excluidas del desarrollo".

La "gran experiencia"...

Antes, en una conferencia de prensa conjunta con el premier canadiense, Fox Quesada aprovechó para hablar de los acuerdos que alcanzó con Chrètien, destacando el que se logró "para aprender de la gran experiencia de Canadá y trabajar juntos sobre un sistema para la devolución de los impuestos, que ya tienen aquí para que las familias se ajusten según sus ingresos. Eso es concretamente lo que le estamos proponiendo al Congreso en México: cómo devolver el impuesto mercantil a los pobres".

Hemos "descubierto" -añadió el Ejecutivo mexicano-que "así lo hacen aquí en Canadá, y que lo hacen de manera excelente. Vamos a tener una reunión para saber más de su mecanismo de cómo devuelven a los pobres el costo del impuesto mercantil que se está gravando".

Reiteró ?a pregunta expresa? su optimismo en que el Congreso aprobará su iniciativa. "Espero que así sea, porque tiene que ver con el futuro del país, porque transfiere recursos directamente a los pobres, porque nos va a permitir tener sistemas de salud y educación pública de la calidad que hay en Canadá y en otros países desarrollados, y para que todos, las clases medias y los pobres, tengan servicios de gobierno a la altura de su dignidad y a la altura de sus expectativas".

La explicación del vecino

Por parte del gobierno canadiense, la ministra de Desarrollo de Recursos Humanos, Jane Stewart, se encargó de explicar el contenido de la carta de intención -a la que se llamó "para el desarrollo social y humano" en México y Canadá, y que firmó junto con el canciller Jorge G. Castañeda-, y abundar sobre la "gran experiencia" de su país, con un sistema recaudatorio que tanto llamó la atención del presidente Fox.

Y fue el mismo Jorge Castañeda quien promovió que la funcionaria canadiense platicara con algunos medios mexicanos sobre este tema. Explicó Stewart el impuesto sobre bienes y servicios que se aplica en este país, y que en México sería algo parecido al IVA:

"Al principio establecer este impuesto fue muy difícil, porque es rembolsable; pero en una economía moderna lo que consideramos de verdad es que debemos tener todos los elementos: impuesto sobre la renta para personas físicas, para personas morales e impuestos sobre el consumo. Y si todos estos flujos funcionan bien, nos ayudan a enfrentar los altibajos de la economía, porque dependiendo de lo que pase en la economía, es posible que uno u otro flujo sea más viable...".

Cualquier impuesto nuevo -agregó- siempre es difícil, "pero las estructuras fiscales y las buenas decisiones del gobierno permiten lograr un equilibrio y usar la mayor riqueza con que se cuenta para fines de inclusión de todos los ciudadanos... a través de nuestra carta de intención, esos son los tipos de modelo que necesitamos explorar" mexicanos y canadienses.

En el caso de Canadá explicó que es través del impuesto sobre la renta para personas físicas como se compensa a los más pobres. "Lo bueno de usar esta estructura es que se puedan hacer cosas como éstas: devolver dinero a los ciudadanos con bajos ingresos o apoyar programas para complementar los ingresos de las familias. En Canadá, por ejemplo, tenemos un programa de subsidio nacional para los hijos, que también puede significar rembolsos a las familias, al ayudarles a sufragar gastos como zapatos o lo que necesiten".

Más tarde, se dio a conocer el contenido de la "carta de intención", en la que se reconoce que ante la creciente interdependencia de políticas económicas y sociales en un mundo que se globaliza, "es importante encontrar nuevas formas de cooperación en los campos de desarrollo social y humano entre los dos países".

Otra razón por la que se firmó radica en que la "globalización crea la necesidad de concebir nuevos modelos de desarrollo social y humano".