JUEVES Ť 19 Ť ABRIL Ť 2001
Ť Fuerzas policiacas y del ejército impiden la toma de yacimientos de gas
Reabren hospitales públicos en Bolivia tras dos semanas de huelga; arreglo con el sindicato
Ť Se reanudan las negociaciones con la COB, máxima central obrera del país
Ť Insisten las autoridades en impedir que la marcha de cocaleros llegue a La Paz
AFP, DPA Y AP
La Paz, 18 de abril. El gobierno y los sindicatos bolivianos suscribieron hoy un convenio para la renovación administrativa de la Caja Nacional de Salud (CNS), al tiempo que fuerzas del ejército y la policía arribaron a la ciudad de Yacuiba para impedir que manifestantes tomen el control de los yacimientos de gas de San Alberto.
El acuerdo entre gobierno y sindicatos, alcanzado luego de dos semanas de huelga de los trabajadores, establece la dimisión de toda la planta ejecutiva de la CNS, incluyendo la remoción del presidente de la institución, Jaime Gallo, y la designación de una terna por parte de la Central Obrera Boliviana (COB), la máxima instancia laboral.
El convenio, que ha permitido la reapertura de los hospitales y policlínicas del sector público, según fuentes sindicales y del Ministerio del Trabajo, también dejó sin efecto el despido de un centenar de sindicalistas y sanciones al personal de la institución.
Además, se formó una comisión para revisar los contratos sobre administración por terceros de los servicios no médicos, pues los trabajadores se oponen a la privatización de los servicios de limpieza, alimentación y lavandería, anunciada el gobierno de Hugo Bánzer.
En paralelo, este día se reanudó el diálogo con la COB para la discusión de un pliego de 120 puntos, y cuatro sindicalistas comenzaron una huelga de hambre para presionar a las autoridades.
Fuentes del gobierno confirmaron el envío de tropas del ejército y la policía a Yucuiba, en la frontera con Argentina, luego de que un comité cívico local anunció una huelga para este jueves, que pondría en riesgo los yacimientos de gas de San Alberto que explotan la brasileña Petrobrás y la filial de la francesa Total Exploration.
El dirigente cívico Wilman Cardoso confirmó que el objetivo de la huelga conllevaría el bloqueo de todos los accesos a Yacuiba y necesariamente de las empresas petroleras.
El comité cívico demanda la administración autónoma de unos 370 millones de dólares provenientes de regalías petroleras, pues la región se ha convertido en la principal reserva energética del país.
Así las cosas, el gobierno de Bánzer, que mantiene su decisión de impedir que los campesinos cocaleros de Cochabamba y de la norteña región de los Yungas lleguen a La Paz, acusó a los provenientes de la región del Chapare de atacar a balazos dos cuarteles de la policía en la zona.
El líder cocalero Delfín Olivera negó lo anterior y dijo que el gobierno pretende justificar la masiva presencia de tropas en la región.