MARTES Ť 17 Ť ABRIL Ť 2001

Ť Usó la Constitución como órgano informativo, asegura López Bárcenas, del INI

Simulación, la reforma indígena de Salinas

Ť El funcionario y la investigadora Magdalena Gómez apoyan la iniciativa de Cocopa

VICTOR BALLINAS

El director de Procuración de Justicia del Instituto Nacional Indigenista (INI), Francisco López Bárcenas, aseveró ayer en la Universidad Iberoamericana que las reformas indígenas que se hicieron a la Constitución en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari "sólo son una simulación". Se simula que los indígenas tienen derechos, pero no se reforman las instituciones para que éstos puedan ejercerlos.

Mixteco de Oaxaca, de profesión abogado y actualmente funcionario de primer nivel del INI, López Bárcenas destacó en en el coloquio Derechos Humanos y Pueblos Indios que de nada sirve a los indígenas el artículo cuarto constitucional tal y como está, porque "no aporta nada. Es simulación, y sólo eso". Salinas usó la Constitución como órgano informativo.

"ƑPor qué?", se cuestionó el funcionario, y respondió: "Porque el artículo cuarto constitucional sólo informa -en su primer párrafo- que la nación mexicana tiene una composición pluricultural sustentada originalmente en sus pueblos indígenas". Eso, insistió el funcionario, "no hace más que informar que somos un pueblo pluricultural. ƑY qué con eso? Dónde están los derechos. Es simulación".

Está incompleto, añadió el director de Procuración, porque más abajo, en ese artículo se dice que "la ley protegerá y promoverá el desarrollo de sus lenguas, culturas, usos, costumbres, recursos y formas específicas de organización social, y garantizará a sus integrantes el efectivo acceso a la jurisdicción del Estado..."

López Bárcenas manifestó que "en 1989 el gobierno metió la pata" cuando la OIT puso a discusión la modificación del Convenio 107 sobre Pueblos y Derechos Indígenas. La OIT preguntó a los gobiernos si estaban de acuerdo en cambiar los conceptos tierras por territorios; usos y costumbres por derecho constitucional, e introducir otros como poblaciones indígenas en lugar de pueblos. "Y metió la pata el gobierno porque estaba acostumbrado a hacer y firmar sin dar a conocer los convenios; lo que sucedió fue que los indígenas ya andaban en la revuelta. Desde 1975 empezaron a tocar las puertas de organismos internacionales, incluso ya habían tomado la ONU".

Se pronunció por la iniciativa de ley enviada por el Ejecutivo al Congreso, y subrayó: "si no se reconoce el sujeto colectivo, de nada servirá reconocer los derechos indígenas".

Los cambios al artículo 27

La investigadora Magdalena Gómez Rivera destacó en su intervención que "la verdadera reforma salinista que le dio un golpe fuerte a la existencia de los pueblos indígenas fue al artículo 27 constitucional. "Trastocó la tierra. Fue esta reforma constitucional la que prendió la alarma roja a los indígenas", expuso.

Como ex funcionaria del INI, explicó, en varios recorridos que hizo constató esa situación. Narró algunos comentarios que los yaquis le hicieron saber a los legisladores que aprobaron esa reforma, entre ellos, la diputada Beatriz Paredes. "Los yaquis le dijeron a Paredes que estaba muy bien que los indígenas podamos vender nuestras tierras, comprar y prestarlas a quien deseemos, nada más que la necesidad es mucha, y por 500 pesos vamos a perder la tierra si ustedes no dan marcha a esa reforma".

Incluso, recordó Gómez Rivera, la reforma constitucional al 27 en el sexenio salinista tachó a los que se oponían a esa reforma de que "queríamos tratar a los indígenas como menores de edad. Que no se les quería reconocer su derecho a vender y comprar la tierra".

Los yaquis, reiteró Gómez, tenían muy claro los riesgos de esa reforma: "ellos decían: si no detenemos esa reforma, ahora sí que nos van a acabar".

En su intervención apoyó la ley Cocopa, y precisó que no es cierto, como se busca presentar a la opinión pública, que los indígenas se quieran independizar del país. "No piden soberanía sino autonomía, que no es sino la capacidad de decisión, que es un requisito indispensable para gobernar legalmente. Ƒ Por qué necesitan esa autonomía: porque el país está integrado por una diversidad de culturas. Plantean autonomía para poder tomar decisiones en asuntos que tienen que ver con espacios de poder".

Y aseveró: "El silencio de la ley también es ley. Cuando se omiten los derechos de las indígenas, se omiten derechos".

En tanto, la investigadora del Centro de Investigaciones y Estudios Sociales en Antropología Social-Sureste, Araceli Burguete, señaló que a los indígenas, con la aprobación de la ley Cocopa, se les reconocerán sus derechos, pero todos limitados.