Ť Unos 400 reclusos mantienen el ayuno por las pésimas condiciones carcelarias
Mueren tres presos políticos turcos en huelga de hambre; suman ya nueve los fallecidos
Ť Denuncian defensores humanitarios que el Ministerio de Justicia desoye las demandas
Ť Protestas en Alemania por la mala situación en que se encuentran los presos en Turquía
DPA Y PL
Ankara, 12 de abril. Con la muerte de tres presos políticos se elevó a nueve el número de víctimas en las cárceles turcas ante una huelga de hambre que mantienen unos 400 presos políticos de izquierda desde octubre pasado, debido a las malas condiciones carcelarias en que se encuentran.
La Asociación pro Derechos Humanos informó sobre la muerte de Celal Alpay y Abdullah Bozdag, quienes formaban parte de grupos izquierdistas ilegales, que ante el deterioro de su estado de salud se hallaban en un hospital de Izmir.
Asimismo, el periódico Radikal reportó la muerte en la noche del miércoles de un recluso de la prisión de Buca, en el noroeste de Turquía, quien fue identificado como Tuncay Gunel.
Los grupos defensores de los derechos humanos han denunciado que el Ministerio de Justicia ha hecho caso omiso de las demandas de los presos a pesar de que los médicos han advertido que la vida de ellos corre serio peligro, pues en su larga huelga de hambre han sobrevivido a base de agua azucarada, sal y suplementos vitamínicos.
El vicepresidente de la Asociación de Médicos de Turquía, Metin Bakkalci, indicó que si los dirigentes políticos de su país aceptaran el diálogo, el problema provocado por el ayuno se resolvería en un solo día, y acusó que las autoridades turcas han in-tentado presentar a la opinión pública las huelgas de hambre como un problema mé -dico para eludir su propia responsabilidad.
En ese marco, una veintena de manifestantes turcos protestó por la situación de los presos en Turquía con la toma durante dos horas de las oficinas de la agencia de noticias británica Reuters en Colonia, Alemania, y otro grupo de unos 10 turcos hizo lo propio en las oficinas de la revista semanal Der Spiegel, en Hamburgo.
En Ankara quedaron prohibidas las manifestaciones desde este jueves y durante un mes para evitar disturbios, como los ocurridos durante la víspera cuando se registraron unos 200 heridos.