Disparan soldados israelíes contra delegación palestina; dos heridos
Ť Los miembros de la misión se habían reunido poco antes en Erez con representantes de Tel Aviv
Ť Fue un "ataque deliberado" para detener pláticas, acusa el jefe de seguridad Mohhamad Dahlane
AFP, AP, DPA Y REUTERS
Jerusalen, 4 de abril. Dos palestinos re-sultaron heridos esta noche por disparos contra automóviles que transportaban a miembros de una delegación que acaba de sostener un encuentro con representantes israelíes en la región de Tel Aviv, informó Mohhamad Dahlane, jefe de seguridad preventiva de la franja de Gaza.
El encuentro el primero de alto nivel celebrado desde que el ultraderechista Ariel Sharon asumió el poder el pasado 6 de febrero, fue convocado para analizar el relanzamiento de la cooperación en materia de seguridad para poner fin a la violencia que ha recrudecido en las últimas semanas.
Sharon, quien todavía el martes dijo que no habría negociaciones mientras continuará la violencia, no hizo pronunciamiento alguno sobre el encuentro.
Los dos automóviles en que viajaban Mohhamad Dahlane y sus escoltas fueron alcanzados por disparos de soldados israelíes cerca de Erez, principal punto de paso entre Israel y la franja de Gaza, informó el propio Dahlane.
"Fue un ataque deliberado después de nuestra reunión con una delegación israelí, pero el hecho de que dos de mis escoltas estén heridos no bastará para impresionarme", añadió el responsable que participó en la reunión con el jefe del servicio de seguridad israelí, Avi Dichter, y varios generales, auspiciada por Estados Unidos.
También poco después de que se anunció el fin de estos primeros contactos, un enfrentamiento en-tre soldados israelíes y palestinos en Nablus dejó heridos a al menos ocho palestinos, entre ellos una mujer y su pequeña hija. En la franja de Gaza, el ejército israelí perpetró ataques de mortero contra supuestas bases de extremistas.
La noche anterior, una bomba hecha con un tubo relleno de clavos colocado en la cajuela de un automóvil estacionado enfrente de una vivienda en Tel Aviv, hirió a ocho personas, el más reciente atentado atribuido a palestinos.
Media la Unión Europea
El encuentro entre responsables de seguridad ocurrió luego de una reunión en Atenas entre el canciller israelí, Shimon Peres, y el mi-nistro de Relaciones Internacionales de Palestina, Nabil Shaat, y el negociador palestino en jefe, Saeb Erakat, en el que también estuvo presente Javier Solana, responsable de Política Exterior y Seguridad Común de la Unión Europea.
Solana instó a ambos políticos a "condenar la violencia venga de donde venga, observar la mayor moderación posible y continuar
"El hecho de que hoy o mañana se reanuden las conversaciones sobre seguridad constituye una primera señal de que existen posibilidades concretas para poner fin a la violencia y comenzar las ne-gociaciones", sostuvo Peres, quien ayer afirmó que se había llegado a "la cima" de las tensiones entre israelíes y palestinos, en aparente contradicción con Sharon.
De hecho, el encuentro de hoy entre responsables de seguridad de ambas partes fue la primera reunión de alto nivel celebrada desde que Sharon asumió el poder el pasado 6 de febrero.
Si bien no trascendió el contenido de estas conversaciones, que se llevaron a cabo en un lugar secreto del territorio israelí, sí se informó que se inscribieron en el mar-co de los acuerdos de Charm el Cheij de octubre pasado, en los que las partes en conflicto se comprometieron a cooperar en materia de seguridad para poner fin a los enfrentamientos que comenzaron a fines de septiembre anterior y que continúan hasta la fecha.
Entre los participantes en las ne-gociaciones figuraron Dahlane y el jefe del servicio palestino de seguridad preventiva en Cisjordania, Jibri Rajub, y por la parte israelí Avi Dichter y los comandantes de las regiones centro y sur, los generales Yitzhak Eytan y Doron Almog.
El vocero del Departamento de Estado, Richard Boucher, dijo que un representante de su país había participado en este encuentro. A su vez, voceros de Sharon afirmaron que el asistente a la reunión fue un alto oficial de la CIA.
Se informó que la reanudación de contactos incluyó además una reunión en Ramallah entre el presidente Yasser Arafat y tres legisladores israelíes que le transmitieron un mensaje del ministro de Defensa, Benjamin Ben Eliezer, pero no se ofrecieron detalles.
Pero mientras que en la arena política empezaba a haber señales de negociación, la ofensiva militar israelí fue reforzada en las últimas con lanzagranadas.
En la franja de Gaza, el ejército atacó con morteros posiciones de la palestina Fuerza 17, encargada de la seguridad de Arafat y a la que Tel Aviv acusa de estar involucrada en atentados. No se reportaron heridos en los ataques.
Cerca de Hebrón, cinco soldados israelíes murieron y otro más resultó herido al volcarse el vehículo en el que viajaban.
En un principio se dijo que la patrulla había sido blanco de francotiradores, pero más tarde el ejército israelí dijo que sus hombres habían sufrido un accidente.
Agresión planificada
En tanto, el ministro palestino de Industria, Saadi al Krunz, denunció que los ataques israelíes han destruido 57 fábricas en Cisjordania y la franja de Gaza, en un evidente intento de "aniquilar" los medios de producción palestino.
El funcionario aseguró que es falso que los ataques israelíes se concentren contra instalaciones de grupos o instituciones que podrían perpetrar ataques antisraelíes.
Al Krunz aseveró que antes de que comenzaran los bombardeos israelíes, el sector industrial palestino estaba en plena expansión, y que en el año pasado registró un crecimiento de 21 por ciento.
Acusó además a Israel de impedir el ingreso de productos palestinos al mercado israelí, y afirmó que las importaciones de Tel Aviv en los territorios palestinos son seis veces superiores a las exportaciones palestinas hacia Israel.
La agencia de la Organización de Naciones Unidas para los refugiados palestinos señala, además, que desde el comienzo de la intifada hay pérdidas por 11 millones de dólares diarios debido al cierre.
Como ejemplo de esto está la aldea palestina de Mawassi, en el sur de Gaza, que está rodeada de asentamientos judíos, donde toneladas de tomate y otros productos agrícolas llevan semanas de estar pudriéndose en los campos pues los campesinos sólo pueden cosechar cuando el ejército lo permite.