JUEVES Ť 5 ŤABRIL Ť 2001

Ť Se utilizaría para erogaciones del Estado relacionadas con seguridad, argumenta

Eliminar partida secreta pero incluir gastos confidenciales, plantea Fox al Congreso

Ť En caso de no aprobarse a tiempo la ley de ingreso, plantea que siga vigente la anterior

ROBERTO GONZALEZ AMADOR, CIRO PEREZ SILVA Y DAVID APONTE

El gobierno de Vicente Fox Quesada envió al Congreso una iniciativa de reforma constitucional para eliminar del presupuesto de egresos de la Federación la ''partida secreta'' de gastos de la Presidencia, pero a cambio pide sea creada una ''categoría de gastos de carácter confidencial'', exclusivamente destinados a atender asuntos de ''seguridad pública o nacional''.

El texto de la iniciativa de reforma presupuestal planteada por el Ejecutivo prevé mecanismos para mantener la secuencia del gasto público en caso de que el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) no sea aprobado antes del inicio del ejercicio fiscal, además de que pretende elevar a rango constitucional la obligación de que el sector público mantenga finanzas en equilibrio, es decir, que opere sin déficit fiscales.

En el documento, que será conocido formalmente este jueves por el pleno de la Cámara de Diputados -aunque desde ayer al mediodía se encuentra en la página de la Secretaría de Hacienda en Internet-, el presidente Vicente Fox plantea que la partida secreta del PEF ''ha sido objeto de críticas por no existir mecanismos que permitan revisar su aplicación''. Desde 1999, el presupuesto no ha incluido recursos para este rubro, con lo cual en la práctica se ha eliminado su uso.

''No obstante lo anterior -señala el documento- debe tomarse en consideración que existen gastos del Estado, concretamente los relacionados con la seguridad pública o nacional, que podrían requerir cierta confidencialidad para su ejercicio. Tales gastos se relacionan por ejemplo con acciones de combate al crimen organizado, incluyendo el narcotráfico y acciones para salvaguardar la soberanía del Estado. En caso de que dichos gastos no estuvieran sujetos a criterios de confidencialidad, podrían dificultarse las acciones'' para combatir esos delitos, establece la iniciativa.

Por tanto, la administración foxista propone eliminar la partida secreta del PEF y crear la partida de gastos de carácter confidencial exclusivamente en materia de seguridad pública y nacional, los cuales estarían sujetos a principios de transparencia al ser revisados por la entidad de fiscalización superior de la Federación.

Por tratarse de gastos relacionados con la seguridad pública o nacional, la iniciativa propone que sólo se pueda hacer pública la información sobre el uso de esos recursos cuando de su revisión por parte del órgano de fiscalización se derive el fincamiento de responsabilidades.

''Este mecanismo permitiría que el Estado pudiera realizar gastos esenciales de seguridad pública o nacional de manera confidencial, sujetos a la aprobación de la H. Cámara de Diputados y a la fiscalización por parte de la Auditoría Superior de la Federación''.

Reconducción presupuestaria

El texto de la iniciativa presidencial en materia de elaboración del presupuesto anual de la Federación prevé establecer un mecanismo de reconducción presupuestaria en caso de que al inicio del ejercicio fiscal (el primero de enero de cada año) no se encontrasen aprobados la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos de la Federación.

En los últimos tres años, el hecho de que ningún partido político tenga mayoría en la Cámara de Diputados ha llevado prácticamente al límite (31 de diciembre de cada año) la discusión sobre el paquete económico de cada año. La Constitución no prevé actualmente un mecanismo institucional en caso de que al inicio de un ejercicio fiscal no se hubiere aprobado la ley de ingresos y el PEF.

La iniciativa presidencial considera que la Constitución debe prever un procedimiento de reconducción de las iniciativas de ingresos y gastos, ''ya que al no contar con él promueve la incertidumbre jurídica y económica y, en última instancia, representa un gran riesgo institucional para el adecuado funcionamiento del Estado y el bienestar de sus habitantes''.

El mecanismo que propone para que, en caso de no ser aprobada a tiempo la ley de ingresos, el gobierno pueda continuar recaudando las contribuciones para cubrir los gastos públicos es que continúe vigente la ley de ingresos aprobada el año anterior, conservando la estructura impositiva y tasas de las leyes fiscales, tales como los impuestos al valor agregado, sobre la renta, al activo y especial sobre producción y servicios, así como el régimen fiscal de Petróleos Mexicanos.

En cuanto a los ingresos provenientes de la contratación de deuda, propone que el endeudamiento neto público sea hasta por el equivalente al del año anterior. En la ley reglamentaria se propondrá que no se pueda incurrir en déficit presupuestario y reducir la diferencia entre ingresos y gastos del gobierno a cero, salvo que existiera la necesidad de utilizar los ingresos provenientes del déficit presupuestario para cubrir el pago de intereses y servicio del endeudamiento gubernamental.

Además, propone que los ingresos excedentes que rebasen los montos previstos en la ley de ingresos del año anterior, incluyendo los petroleros, no puedan utilizarse para cubrir el PEF. Dichos ahorros sólo se podrían destinar al pago de la deuda pública o a constituir reservas para atender gastos relacionados con pensiones, desastres naturales o algún otro tipo de contingencia.

Por lo que hace al renglón de gastos, la iniciativa propone que si el PEF no es aprobado antes del inicio del ejercicio fiscal se aplique provisionalmente el presupuesto del año anterior, únicamente respecto a los siguiente gastos: las erogaciones determinadas en cantidad específica en las leyes, como son las aportaciones a estados establecidas en la Ley de Coordinación Fiscal; aportaciones a seguridad social tanto para trabajadores afiliados al IMSS, al ISSSTE y miembros de las fuerzas armadas y las obligaciones que se deriven de tratados internacionales.

Además establece que se podrá erogar el gasto corriente -relacionado con las funciones de gobierno y sueldos y salarios de la administración pública- aprobado el año anterior ''hasta por el porcentaje que determine la ley''. También se pagarían las obligaciones derivadas de la deuda pública.

En la iniciativa se prevé que al entrar en funcionamiento el mecanismo de reconducción, automáticamente se active un periodo extraordinario de sesiones para que el Congreso llegue a un acuerdo definitivo sobre las iniciativas de ingresos y gastos

Equilibrio presupuestal por decreto

En el documento que este jueves conocerán los diputados, el presidente Fox asegura que cada vez de forma más generalizada ''se reconoce la contribución que tiene la disciplina fiscal mediante el equilibrio presupuestario para el desarrollo de los países. Finanzas públicas sanas (sin déficit fiscal) no implica reducir la atención del gobierno en las tareas del desarrollo, por el contrario, es parte de un proceso para acrecentar las posibilidades del mismo''.

En ese orden de ideas, la iniciativa prevé que cuando el Congreso apruebe un presupuesto con déficit presupuestario, es decir, que los gastos superen a los ingresos como ocurre ahora, el Poder Legislativo deberá establecer en el dictamen correspondiente la reducción progresiva del déficit en los tres años subsecuentes, para que en el cuarto año se haya eliminado totalmente.

''Esta propuesta se basa en el objetivo de lograr la desaparición del déficit público de manera sostenible. Es decir, que los ejercicios fiscales que, por cualquier causa, resulten en un déficit, sean excepcionales y que en todos los casos se tomen las acciones necesarias en un plazo perentorio para suprimirlo'', señala el documento.

Este año, el déficit fiscal previsto es de 0.65 por ciento del PIB.

También en el terreno presupuestal y de ingresos, la iniciativa prevé que el Congreso autorice partidas de gasto con carácter multianual, lo que eliminaría la restricción vigente de que los rubros de egresos sólo pueden ser comprometidos por un ejercicio fiscal.

Además, señala que el Ejecutivo federal elaborará las iniciativas de Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos de la Federación y las hará llegar a la Cámara a más tardar el 15 de octubre (un mes antes del límite vigente hasta ahora). Sólo se podrá ampliar el plazo de presentación de las iniciativas cuando medie solicitud del Ejecutivo justificada a juicio del Legislativo y para ello deberá comparecer en todo caso el secretario del despacho correspondiente a informar las razones que lo motiven.