LUNES Ť 2 Ť AB RIL Ť 2001

Ť La Reserva Federal está dando a los mercados una falsa esperanza, afirman

No sólo los inventarios ensombrecen la economía de Estados Unidos, dicen expertos

Ť Los consumidores gastan menos y crecerá la desocupación en breve, pronostican

REUTERS

Washington, 1o. de abril. Mantengan la calma, eviten el pánico en torno al mercado accionario y concéntrense en la luz al final del túnel, pues Estados Unidos sufre los espasmos de un problema temporal de inventarios que parece estar llegando a su fin.

Al menos ese fue el mensaje de diseminaron la semana pasada funcionarios de la Reserva Federal de este país.

Pero no todos los que se ocupan de realizar pronósticos aceptaron el argumento de que los inventarios son el centro de los problemas económicos, y si tienen razón, un rápido cambio en la línea de crecimiento podría ser elusivo.

''La Fed hace énfasis en un importante factor de viraje de la economía: los inventarios'', expuso Cary Leahey, economista en el Deutsche Banc Alex Brown. ''Pero están dando a los mercados una falsa sensación de esperanza de que eso es lo único que necesita ser atendido'''.

Los economistas que estiman que el tema de los inventarios podría ser incorrecto y citan otros muchos problemas que deberá confrontar la economía en los próximos meses.

Entre esos asuntos se incluye el ''efecto negativo de riqueza'' -el enfriamiento de los gastos del consumidor por la caída del mercado, las presiones sobre ganancias corporativas que podrían generar más despidos en el futuro y la lentitud de las economías extranjeras que podrían dañar aún más el crecimiento económico de Estados Unidos.

Hasta ahora, la tasa de desempleo está en un muy bajo nivel de 4.2 por ciento, pero los pesimistas piensan que crecerá en los próximos meses, particularmente tras la serie de anuncios de despidos que ya comenzaron a escucharse en las corporaciones estadunidenses.

Pese al tono relativamente optimista, los funcionarios de la Fed, que han bajado las tasas de interés en un fuerte 1.5 puntos porcentuales este año, no han ignorado esos otros temas.

En su declaración tras la reunión del comité de política monetaria del 20 de marzo, la Fed dijo que la corrección en los inventarios estaba ''bien encaminada'', pero levantó una alarma que no había usado en anteriores declaraciones: exceso en la capacidad de producción, una señal de un potencialmente más largo y serio problema.

La Fed dijo que ''el exceso en la capacidad de producción ha emergido recientemente'' y agregó que ''la posibilidad de que este exceso pueda continuar por algún tiempo y el potencial por una debilidad en las condiciones de la economía global, sugieren riesgos sustanciales y la producción podría seguir floja''.

Pero en sus discursos de la semana pasada varios funcionarios de la Fed destacaron el manejable problema de ajuste de inventarios que ha golpeado al sector manufacturero, particularmente a los fabricantes de computadoras y de otros equipos de información tecnológica.

''Lo que parece estar sucediendo aquí es una corrección en los inventarios'', explicó Alfred Broaddus, presidente de la Reserva Federal en Richmond, durante un foro económico celebrado el miércoles.

''Es muy difícil cuantificar esto con precisión, pero tengo la sensación de que el ajuste de inventarios en algunas de estas industrias se adelanta a buen ritmo'', agregó.

Broaddus planteó dos escenarios para la economía. El más pesimista, que mencionó brevemente, considera una mayor debilidad de la economía debido a que la drástica caída en los precios de las acciones llevará al consumidor a cerrar su billetera y además estará influido por el efecto de la lentitud de las economías de Japón y Europa en Estados Unidos.

Pero dijo que se inclinaba hacia el escenario más brillante, que proyecta un rápido reajuste en los inventarios de los negocios que permitiría a las compañías subir nuevamente la producción.

Broaddus sostuvo que la economía estadunidense bien podría ver ''la reanudación de un fuerte crecimiento en la segunda mitad del año o posiblemente antes''.

Haciéndose eco de ese optimismo estuvo Robert McTeer, presidente del Banco de la Reserva en Dallas, quien consideró que ''la disminución o caída se limita principalmente a la manufactura'''.

Pero el gobernador de la Fed, Laurence Meyer, aludió a perspectivas más sombrías. Aunque pronostica una gradual recuperación de la economía después del segundo trimestre, agregó que el crecimiento en la segunda mitad del 2001 probablemente caería por debajo de su potencial a largo plazo. Muchos expertos interpretan eso como una tasa anual de 4 por ciento. Consideró que la recuperación, cuando llegue, será gradual y el crecimiento no recuperará su ritmo sino hasta el año 2002.