jueves Ť 29 Ť marzo Ť2001
Andrés Aubry
Ambiguo decreto, ambiguo desarrollo
Uno de los instrumentos de las ciencias sociales es el análisis de discurso, cuya semántica traiciona no sólo conceptos sino actitudes, o entrampa en el vocabulario lo no dicho por las palabras, no por duplicidad sino por destapar inconscientemente lo no percibido como una especie de ceguera. Así descodificado, el discurso, al expresar lo que quiere quien lo pronuncia, manifiesta al mismo tiempo lo que no ve, es decir, la distancia que siembra entre sus interlocutores, o sea, su proximidad o su lejanía de quien lo escucha. El análisis de discurso pone de manifiesto las lógicas que lo inspiran y le dictan su vocabulario, contrastando quien habla con quienes lo escuchan.
Desde el voluntarismo presidencial, las señales están cumplidas. Pero las carambolas de las palabras se entienden como contraseñales.
La señal: el Ejército se va de las siete posiciones exigidas por su contraparte; con ella va de propina un regalo: un "centro de desarrollo comunitario".
La primera contraseñal es para la Defensa. La semántica del discurso del EZLN toma precauciones con su adversario. Prudentemente escoge un vocabulario administrativo neutral: "el retiro" de las tropas, palabra que no conlleva calificación alguna, pero sí recalca un objetivo: la "desmilitarización", es decir, algo que solicita la decisión presidencial de una salida política del conflicto. (Comunicado del 2 de diciembre 2000, quinto, apartado C.) Al contrario, el repetido vocabulario foxiano humilla: su "repliegue" es un término militar que connota un costoso reajuste o la rectificación de una estrategia equivocada. El ofendido es el Ejército, pero la víctima bien podría ser el zapatismo.
La otra contraseñal es el regalo, que se torna envenenado.
ƑDónde están los siete puntos señalados? Junto a los Aguascalientes. Amador Hernández, Río Euseba y Guadalupe Tepeyac son centinelas que controlan la actividad del Aguascalientes de La Realidad; Jolnachó vigilaba el de Oventic; Roberto Barrios aquél del mismo nombre, al igual que La Garrucha, y Cuxuljá en el entronque del Aguascalientes de Morelia el que, después de padecer agresiones, está compensado por la resistencia de Moisés Gandhi.
ƑQué es un Aguascalientes? Son las ágoras en que las comunidades van convirtiendo el ejército zapatista de liberación nacional en fuerza política, con centros de desarrollo cultural asistidos por un sistema educativo y bibliotecas, en la búsqueda de otro desarrollo económico y productivo con nuevo urbanismo rural, tecnología orgánica, salud preventiva y alternativa, y otras actividades autogestionadas que son, en el seno mismo de la guerra, laboratorios metódicos del ejercicio de la paz, o sea, de otra sociedad para una nación renovada. Aunque sean rebeldes y resistentes, no son clandestinos, puesto que se exhibieron en el Intergaláctico como una tribuna mundial para diseñar el rostro concreto de la paz con justicia y dignidad.
Pero la paz presidencial, en el discurso y en los seis artículos del decreto, los ningunea. Después de las caricaturas de labor social que recompensa a los buenos y olvida a los demás en el asistencialismo militar de corte de cabello y distribución de remesas, el decreto pretende "organizar y apoyar administrativamente a cada centro, de acuerdo con su consejo; promover y estructurar la concertación de acciones con los grupos de los propios pueblos y con la organización de la sociedad civil" (artículo 4Ɔ del decreto). ƑLos Aguascalientes no están ya organizados desde 1995? ƑEl Comité Clandestino Revolucionario Indígena del que emanan los 23 comandantes no es un consejo eficaz que restructura y va concertando hasta el Poder Legislativo? ƑLa sociedad civil no fue movilizada y organizada por la marcha de tres mil kilómetros para socializar el trabajo obstinado, pacífico y legítimo de los Aguascalientes? ƑNo es un insulto recibir lecciones de quienes no han dejado de subdesarrollar?
Los cinco Aguascalientes son ya probados "centros de desarrollo". Después de hostilizarlos con guerra sicológica y de baja intensidad, Ƒserán contaminados por las dudosas prácticas de Sedeso?
Si la lógica foxista y confesional es la pontificia de Pablo VI ("el desarrollo es el nuevo nombre de la paz"), lo congruente no consta de duplicar, penetrar o torcer el modelo de desarrollo de los Aguascalientes, sino de dar un paso más, allí donde no pueden incursionar: ésta sería la lógica de la salida política y cultural, cuya premisa es la desmilitarización.
Los primeros candidatos a convertirse en centros de desarrollo tendrían que ser las insultantes instalaciones militares de San Quintín y Toniná: bella infraestructura para que florezcan ya en la selva, sin construir más y sin nuevo derroche de dinero, centros de investigación de agricultura tropical, de la patología de la pobreza y de las enfermedades del trópico húmedo, laboratorios de ecología y economía sustentables para el rescate de recursos naturales en peligro, para acercar la investigación, el hospital o la universidad a las comunidades, ya no con pasantes de pobre nivel y sin medios, sino con calificado personal académico dotado de lo necesario.
Esta sería la lógica de la paz y una buena "señal".