Ť Dejó atrás alcoholismo y problemas; peleará en abril contra Hugo Romero

Víctor Rabanales quiere ser otra vez campeón

Ť Su contendiente afirma que deberá imponerse su fortaleza a la experiencia del chiapaneco

JORGE SEPULVEDA MARIN

Con un pasado de alcoholismo y negocios quebrados, además de arrastrar con familiares y amigos que se le acercaron cuando logró ser campeón mundial de peso gallo en 1993 y luego en 96, lo que ha dejado atrás, Víctor Manuel Rabanales aspira a ser campeón en la misma categoría del Mundo Hispano, título vacante que disputará el 12 de abril ante Hugo Romero en la ciudad de Cuernavaca, Morelos.

Romero, a su vez, comenta que debe imponerse su fortaleza ante la amplia experiencia del chiapaneco, pese a que deberá subir dos divisiones, ya que normalmente pelea en peso mosca, pero eso no importa, ya que antes ha combatido en esa categoría, aunque con oponentes no tan duros como Rabanales.

El Rústico, como apodan a Víctor Manuel por su estilo de boxeo, explica que a los 37 años de edad está de vuelta en los cuadriláteros porque los aproximadamente 800 mil pesos que ganó en sus mejores años, finalmente se terminaron hace varios meses, y como los negocios que inició desaparecieron ahora deberá trabajar en lo único que sabe hacer.

Admite que hace un par de años dejó el gimnasio de Ignacio Beristáin. En ese tiempo ha tenido cuatro peleas, de las cuales ganó dos y fue vencido en las otras dos, "pero me he dado cuenta de que ahora que trabajo con Francisco Sánchez me adapto a las nuevas indicaciones y eso me hace más fuerte", señala.

Tras negar, como lo afirmó su hermano Bruno, que en las últimas semanas había regresado a beber desmedidamente alc  ohol, afirma que antes lo hizo, porque pensó que de esa forma se olvidaría de todos los problemas que tenía, hasta que se dio cuenta de que en nada lo ayudaba.

"Es más, si lo hice últimamente fue porque soy de la gente que sabe cómo tomar y hasta qué punto. Pero ahora estoy listo para la próxima contienda", afirma.

Delgado, sonriente, recuerda que suma 67 peleas en cerca de 15 años de púgil profesional, con 50 triunfos, tres empates y las demás reveses.

"En este momento, lo único que te puedo decir es que regresé para ganar, porque estoy muy fuerte y porque debo recuperar no el tiempo, sino el dinero perdido.

"Y te repito: tuve todo lo que quise, pero hoy no tengo ni un peso para pagar mi transporte, pero me verás resurgir, ya que esta será mi última oportunidad", puntualiza.