LUNES Ť 26 Ť MARZO Ť 2001

Ť Sería el quinto intento de los familiares del ex dictador; confían en el apoyo de Fox

El próximo año podrían ser repatriados de Francia los restos mortales de Porfirio Díaz

ANDRES TIMOTEO CORRESPONSAL

Veracruz, Ver. Tras cuatro intentos fallidos realizados en diversos sexenios, los restos mortales de Porfirio Díaz --que se encuentran en París, capital francesa-- podrían ser repatriados el 6 de marzo del próximo año, precisamente al conmemorarse los 100 años de la inauguración del puerto artificial de Veracruz, "y existe la palabra de Vicente Fox de que nos apoyará en las gestiones para que se le rindan los homenajes correspondientes en Oaxaca", según declaró Aurelio Salazar Castillo, promotor del traslado de los restos del ex dictador.

Según su versión, cuando Vicente Fox era candidato presidencial platicó cuatro veces con él sobre el asunto, "y me dijo que si ganaba habría todas las facilidades de su gobierno para que trajeran los restos del ex presidente de México. Ahora estamos a la espera de que cumpla su palabra".

En una última carta enviada a Los Pinos, Aurelio Salazar planteó que el grupo promotor de la repatriación de los restos del ex mandatario "buscaría traerlos el 6 de marzo del próximo año, pero se pretendería realizar también un homenaje con la develación de una placa conmemorativa, la asignación del nombre Porfirio Díaz a una calle de Veracruz y la colocación de una estatua en el edificio de la Aduana Marítima".

Sin embargo, indicó que por el momento tienen paralizados los trámites de repatriación hasta que reciban información por parte de la Presidencia de la República, "porque esperamos que se haga el próximo año como parte de los festejos del aniversario del puerto".

Recordó que se han hecho varios intentos por traer los restos del general originario de Oaxaca; en el gobierno de Miguel Alemán Valdés hubo una petición expresa por parte de la familia del general Porfirio Díaz, e incluso se formó un patronato nacional, "pero se vino abajo todo, porque el entonces presidente dijo que habría honores militares, pero no del gobierno, y los familiares prefirieron que se quedaran en Francia".

Más adelante, volvieron a intentarlo en el sexenio del presidente Adolfo Ruiz Cortines, pero éste les advirtió que se responsabilizarían de los disturbios generados por la llegada de los restos. Cuando gobernaba Gustavo Díaz Ordaz, explicó, los familiares entregaron una carta firmada por el gobierno de Francia en la que se establecía que ejército y gobierno de ese país le harían un reconocimiento como militar y estadista el día de la exhumación, además de poner una corbeta a disposición de la familia para transportar los restos desde Le Havre hasta Veracruz, pero a condición de que se hicieran iguales honores en territorio mexicano.

Díaz Ordaz habría respondido que el pueblo mexicano no estaba preparado para recibir los restos en 1966, "pero ahora nosotros llevamos once años promoviendo su repatriación y su obra como ex presidente de México, porque los libros de texto oficial envenenaron la imagen del general".