LUNES Ť 19 Ť MARZO Ť 2001
Ť Se busca reducir el costo social que representa la existencia de 300 mil vendedores
Reordenará el gobierno el comercio ambulante
Ť Anuncia Martha Rivera la reactivación de las plazas existentes y nuevos corredores
LAURA GOMEZ FLORES
El gobierno capitalino llevará a cabo un programa de reordenamiento del comercio en vía pública en accesos del Metro, cercanías de cárceles, hospitales, iglesias, escuelas y Centro Histórico, con el propósito de reducir los costos sociales que representa la existencia de cerca de 300 mil ambulantes en la ciudad, que evaden en promedio al año 128 millones de pesos en el pago de cuotas a las delegaciones y representan graves riesgos de seguridad.
La directora de programas delegacionales de la Secretaría de Gobierno, Martha Rivera Campos, explicó que la medida considera el impulso de plazas existentes, la creación de nuevos corredores comerciales, el engafetamiento de los comerciantes, el establecimiento de horarios de servicio, el retiro de puestos fijos por semifijos en áreas determinadas y tener un padrón actualizado.
De esta manera se espera recuperar el patrimonio artístico y cultural, eliminar riesgos de insalubridad y mejorar la vialidad peatonal y vehicular, con pleno respeto a sus derechos, pero con miras a regularizar su situación, no afectar la vida de los comerciantes establecidos y de los vecinos, y contar con un control de pagos oficiales por el uso de vías y áreas públicas.
El Código Financiero del Distrito Federal establece tres tipos de cuotas a los vendedores con utilidades mayores a un salario mínimo de 7, 4.40 y 3.30 pesos; y de 3, 2.20 y 2.20 pesos para los grupos vulnerables o de subsistencia con ingresos menores a un salario, quienes todavía cuentan con un descuento adicional de 10 por ciento de pagar en los primeros días del mes correspondiente.
Sin embargo, la forma en que operan ha provocado que sólo se obtenga una séptima parte de los 148 millones de pesos que deberían captarse, destacó la funcionaria al señalar que el programa de reordenamiento considera además la operación de subprogramas para mejorar su calidad de vida en materia de salud, capacitación, recreación y deporte, apoyo a la mujer, guarderías y fomento económico.
El comercio en vía pública constituye un fenómeno social relacionado con la carencia de empleo y educación, así como la migración rural a la ciudad, pues tan sólo 60 por ciento de los 20 mil comerciantes que venden sus productos en el Centro Histórico son del estado de México, situación que debe regularizarse, para acabar con la competencia desleal y la corrupción existente.
Actualmente, se tienen identificadas cinco modalidades: el ambulantaje con 90 mil 661 comerciantes que se ubican en mil 889 puntos de venta, en donde se presentan problemas de carácter vecinal, protección civil, seguridad pública, salud y con las propias autoridades; y los tiaguis, donde 192 mil 109 comerciantes se establecen en mil 75 puntos de venta sin control gubernamental y no observan normas de protección civil.
Más atrás se encuentran los mercados sobre ruedas, que se instalan en colonias con cierto nivel económico y donde se desenvuelven 9 mil 641 comerciantes en 61 puntos de venta, aunque los pagos por derecho de vía son captados por las autoridades federales; y 65 concentraciones con 4 mil 757 puestos ubicados en arroyos vehiculares, en donde expenden productos de primera necesidad.
Finalmente, se encuentran los bazares, con 17 puntos de venta y 2 mil 621 oferentes, que ofrecen antigüedades y artesanías los domingos a turistas nacionales y extranjeros, en lugares como La Lagunilla y el centro de Coyoacán, precisó Rivera.