DOMINGO Ť 18 Ť MARZO Ť 2001

Ť Estamos dispuestos a participar en el proyecto de modernización: Rosendo Flores

Grave abandono operativo en LFC, advierte SME

Ť El cambio administrativo no evitará apagones; rezagos en el mantenimiento desde 1975

FABIOLA MARTINEZ

El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) advirtió que Luz y Fuerza del Centro (LFC), proveedora de energía eléctrica para 25 millones de habitantes del país, está en un grave abandono operativo, que coloca a la zona centro del país en riesgo de un "problema eléctrico mayor".

Rosendo Flores Flores, líder de los 45 mil agremiados al SME, manifiesta que el sindicato está dispuesto a participar en el proyecto de transformación y modernización de LFC, como la alternativa para revertir su crisis operativa y financiera. Sin embargo, aclara: "un cambio de forma o administrativo en la empresa no evitará los apagones; la situación actual parte de rezagos añejos y abandono en el mantenimiento desde 1975, realidad que los administradores de LFC sólo reconocen en corto".

LFC, organismo público descentralizado, con patrimonio y personalidad jurídica propios, mantiene sobre sí una deuda de por lo menos 25 mil millones de pesos, un esquema de tarifas deficitario (compra energía a la Comisión Federal de Electricidad a un precio más caro del que por ley puede comercializar en el Distrito Federal y 159 municipios de estados colindantes) y, particularmente, un grave abandono en generación y mantenimiento preventivo.

En entrevista, Flores precisa que existen áreas cuyas deficiencias ponen en riesgo la óptima operación de la empresa. Un ejemplo significativo de ello, comentó, es producción, con transformadores e interruptores con más de 40 años de uso, como ocurre en la central Los Remedios, que tiene el mayor número de circuitos de potencia 85 KB. Ahí se quemó un transformador, y para la empresa no pasa nada.

Respecto a generación, tenemos una planta de vapor (J. Luque), instalada en 1950, con capacidad de 224 MW. En 1980 agotó su vida útil, y actualmente se mantiene funcionando a una capacidad máxima de 190 MW. Como esos ejemplos hay muchos en los que la administración reconoce que es urgente renovar equipos, pero argumenta que no hay dinero para ello.

De acuerdo con información de este sindicato, de 1978 a la fecha no se ha registrado una inversión importante en el área de generación y se detuvo la modernización de las ya instaladas. El mantenimiento es escaso en las redes de distribución (aéreas y subterráneas) y existen grupos de trabajadores que no cuentan con las herramientas y equipo necesarios.

"Sí existe un riesgo de un problema eléctrico por los motivos señalados, y hoy manifestamos que estamos dispuestos a participar en el proyecto de modernización siempre y cuando no se desvincule el servicio, el sistema y, sobre todo, el carácter público de esta industria", agregó.