SABADO Ť 17 Ť MARZO Ť 2001

Ť Festivos, terminaron plantón frente al IEE

...y sigue siendo el rey: priístas

LUIS BOFFIL Y MIREYA CUELLAR CORRESPONSAL Y ENVIADA

Merida, Yuc., 16 de marzo. Festivos, entre gritos de "¡Cervera sigue siendo el rey!", los priístas dieron fin a 62 días de plantón frente al edificio del Instituto Electoral del Estado. Lo que resuelva la Suprema Corte de Justicia de la Nación no parecía importarles. De hecho, Myrna Hoyos anunció que acatarán su fallo sin reservas.

Fueron días de "defender la soberanía de Yucatán" y de soportar noches en vela, por aquello de la posible intervención policiaca. Y es que los rumores nunca cesaron: el desalojo pesaba sobre los consejeros "espurios" y los custodios priístas que, celosamente --aunque también por dos comidas diarias--, vigilaban el vetusto inmueble electoral de la calle 57.

Pero todo llega a su fin. Esta tarde, los últimos 30 priístas que resguardaban el centro de operaciones del tercero o cuarto Consejo Electoral en funciones (aquí ya se perdió la cuenta), llamado ahora superconsejo de 14 integrantes, recibieron una noticia que, tal vez, ya esperaban, pero confiaban en que tardaría en presentarse: "Señores, muchas gracias por haber permanecido en este sitio y defender la soberanía del estado, pero ya acabó todo y estoy satisfecha por lo que ustedes, desinteresadamente, hicieron. Nos vamos, se acabó", sentenció la diputada Myrna Hoyos, al tiempo que un grupo de mujeres empezaba a corear "¡Sí se pudo, sí se pudo!".

Los abrazos no se hicieron esperar. Myrna, al igual que sus compañeros diputados Rolando Zapata Bello, Lucely Alpizar Carrillo, Josué Chuc Moo y Luis Emir Castillo Palma, fue ovacionada. Todos querían estrecharle la mano, felicitarla. Parecía que se había consumado una gran odisea y los priístas quizá así lo sintieron.

Apenas unas horas antes, los "escuderos" de los consejeros "espurios" recibieron su último agasajo gastronómico. Una tacos de pavo, pollo o ¿puerco? y, sin faltar, sus coca-colas. Eso sí, la música no dejó de fluir. Hasta mariachis se presentaron. De colofón El corrido del desacato. Y dice, más o menos así: Renunciamos a morir en la hoguera del Tribunal del infierno/defendemos la soberanía y justicia del yucateco/traemos como arma el alma y como escudo la razón/vuela vuela palomita y diles a los inquisidores que podemos negociar/pero si ellos traen sus cañones nosotros tenemos un par de...

Myrna, la punta de lanza en casi cinco meses de conflicto, dio el ejemplo. Agarró unas sillas de metal y las apiló. Los priístas hicieron lo mismo. El toldo gigante también cayó. En menos de 15 minutos la calle estaba libre. Faltaba la limpieza. Un camión de bomberos arribó y, a manguerazos, lavó las "impurezas electorales", como dirían algunos.

Finalmente, parecía cumplido el deseo de Myrna Hoyos. "¡Una casa limpia por fuera y limpia por dentro"! ¿Será?