Ť Obispos, políticos y empresarios, presentes en la bendición de nueva sede episcopal
Pide la CEM a los legisladores y al EZLN que "flexibilicen sus posturas" de cara al diálogo
JOSE ANTONIO ROMAN
En un llamado a legisladores y a representantes del EZLN, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) les pidió"flexibilizar" posturas y "escucharse con paciencia, respeto y gran apertura", pues únicamente así responderán positivamente al "momento histórico" que vive el país.
Luis Morales Reyes, presidente del máximo órgano colegiado que reúne a los obispos del país, expresó su confianza en que las partes sabrán encontrar el formato de diálogo que los satisfaga. "Qué bueno que el Congreso de la Unión dé ese ejemplo de saber escuchar a todas las voces de México, a todas las que quieren hacerse oír en ese lugar, que es el lugar de los representantes del pueblo".
Me gustaría mucho, añadió, que los zapatistas fueran "bien escuchados, respetuosamente escuchados, pacientemente escuchados, y que no se agotara la paciencia de ambos lados para que el diálogo tenga efectivamente frutos de paz".
Sin embargo, advirtió que sería "muy peligroso" que el EZLN quisiera presionar al Congreso de la Unión, pues éste poder representa al pueblo de México, es soberano y no debe recibir presiones de nadie. También es necesario que el EZLN tenga mucha paciencia y apertura, y acepte, finalmente, la ley de derechos y cultura indígena como quede aprobada por el Legislativo.
Entrevistado luego de la ceremonia de bendición de la nueva sede de la secretaría general del Episcopado, el también arzobispo de San Luis Potosí dijo que manifestaciones como la caravana zapatista son reflejo de un México que está naciendo. "No hay que tener miedo, son momentos de diálogo intenso, donde también se debe actuar con mucha responsabilidad y mucho amor a México".
El prelado auguró incluso: "si los mexicanos sabemos llevar adelante esta situación y resolverlo mediante el diálogo, ello hará madurar al país, y en un futuro no habrá voz mexicana que no sea escuchada".
En tanto, el vicepresidente de la CEM y obispo de la diócesis de León, José Guadalupe Martín Rábago, entrevistado en el mismo acto, subrayó la "gran flexibilidad" a la que están llamados tanto el Congreso como los representantes zapatistas.
"Si ahora se está dando la oportunidad de un diálogo, es preciso que en vez de colocarse en una actitud de firmeza que impida el que se sienten a la mesa de diálogo, hoy deberíamos invitarlos, sobre todo, a manejarse con gran responsabilidad, dentro de lo que es el respeto a las leyes que nos rigen".
Pidió a la ciudadanía discernir las propuestas formuladas para los derechos y la cultura indígena y no manejarse con base en sentimientos. "Yo creo que en este momento ha sido la euforia, la fiesta, el entusiasmo, pero debe venir un momento donde finalmente pueblo y legisladores se sienten con tranquilidad para ver que propuestas se hacen".
En la bendición del inmueble se dieron citan unos 40 obispos --más de la mitad de los jerarcas en activo del Episcopado-- y miembros de la clase política y empresarial, mezclados en un "día histórico" para la jerarquía eclesiástica: nunca antes su representación episcopal había tenido sede propia.
Tras la sesión matutina del Consejo Permanente del Episcopado, en la que se detallaron preparativos para la próxima asamblea episcopal, a realizarse del 23 al 27 de abril, se inició la ceremonia de bendición, a cargo del cardenal Norberto Rivera Carrera, el nuncio apostólico Giuseppe Bertello y el propio arzobispo Morales Reyes.
En su mensaje, el presidente de la CEM agradeció a los "múltiples benefactores" que hicieron posible la construcción del inmueble, que aunque consta actualmente de cuatro pisos, el proyecto incluye dos más.
Con tal motivo, el secretario de Estado del Vaticano, cardenal Angelo Sodano, envió un mensaje a los obispos mexicanos. Leído en la ceremonia, señala que el papa Juan Pablo II pide al Espíritu Santo que asista a los obispos en el ejercicio de su ministerio a las comunidades diocesanas, alentándolas también a iluminar pastoralmente la realidad del país, para fomentar un clima de mayor solidaridad entre ciudadanos y de ayuda a los más necesitados.
Al término del acto religioso llegaron al nuevo inmueble ubicado a un costado de la Basílica de Guadalupe el secretario de Gobernación, Santiago Creel, y el gobernador del Estado de México, Arturo Montiel, entidad de donde es el actual secretario general de la CEM, Abelardo Alvarado Alcántrara.
En la ceremonia también se dio el primer acto público del nuevo nuncio apostólico, Giuseppe Bertello, aún sin fecha para presentar sus cartas credenciales pese a haber arribado a nuestro país el pasado 26 de febrero. Para otros, la bendición de las nuevas instalaciones de la CEM fue motivo de reaparición púiblica luego de largo tiempo; tal fue el caso de monseñor Guillermo Schulenburg, ex abad de la Basílica de Guadalupe.