MARTES Ť 13 Ť MARZO Ť 2001
Ť La prueba de ADN no cambia nada: ombudsman de BC
Exige obispo se libere al joven acusado de violar a Paulina
Ť Prelado de Tijuana acusa a feministas de manipulación
JORGE ALBERTO CORNEJO CORRESPONSAL
Tijuana, BC., 12 de marzo. El obispo de Mexicali José Isidro Guerrero Macías, pidió la liberación del joven acusado de haber abusado sexualmente de Paulina del Carmen Jiménez Jacinto, luego de que el estudio de ADN, realizado en Estados Unidos, demostró que no hay parentesco entre su presunto violador y el niño Isaac.
A su vez, el obispo de Tijuana, Rafael Romo Muñoz, aseguró luego de conocer la noticia, que la menor fue manipulada por otras personas.
Guerrero Macías propuso seguir las indagatorias, pero además liberar a Julio César Cedeño Alvarez, acusado de la violación en 1999 si éste no es culpable.
Al darse a conocer que el acusado por la violación de Paulina no es el padre de su hijo, el obispo de Tijuana manifestó que sobre Paulina cayeron intereses marcados de grupos feministas que provocaron todo un caos en ese caso.
Por su parte, el procurador de los derechos humanos de Baja California, Raúl Ramírez Bahena, recomendará a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) sostener la recomendación girada en contra del gobierno del estado para que se cree un fideicomiso que permita la manutención del menor, considerando que la actual administración estatal panista violó los derechos humanos y constitucionales de Paulina al negarle la suspensión del aborto.
"No sé qué intereses hay detrás de la publicación de resultados de la prueba de ADN, pero eso no cambia nada en el caso de esta menor (Paulina); ella efectivamente fue víctima de abuso sexual y de violación a sus garantías legales", dijo.
No obstante, para el presidente del Comité Directivo del PAN en Baja California, Francisco García Burgos, los resultados del ADN reafirman la posición de ese partido en una férrea defensa de la vida, toda vez que se estuvo a punto de terminar "por un asunto que resultó ser una mentira".
En tanto, Paulina, quien actualmente tiene 15 años de edad, rechazó hacer cualquier declaración al respecto sin recibir indicaciones de sus abogados.
"Necesitamos platicar con la licenciada (Socorro Maya Quevedo) para ver qué vamos a hacer, ahorita no sabemos nada", dijo junto a su madre, en su casa de la colonia Ampliación Lucerna, de Mexicali.
Por su parte, Humberto Ramírez, hermano mayor de la adolescente, consideró que al difundir los resultados de las pruebas sanguíneas, la autoridad equivoca el sentido de la justicia que exige su familia.
"Cedeño Alvarez es quien menos interesa, el daño ya está hecho, y si piensan que lo mejor es dejarlo libre, que lo hagan, el caso no es saber quién fue o quién no... Ya no sé hasta dónde quieren llevar las cosas", dijo.
Tomás Ramírez, padre de Paulina, apuntó que si el acusado no es culpable, "tan sencillo como que lo dejen salir y ya, pero que la autoridad se haga responsable de lo que suceda".