MARTES Ť 13 Ť MARZO Ť 2001
Ť Mensaje de Cuaresma
Avanza la cultura de la muerte, dicen obispos de Veracruz
JOSE ANTONIO ROMAN
Con un creciente empobrecimiento de la población y una brecha cada vez mayor entre pobres y ricos, México enfrenta el avance de la llamada "cultura de la muerte", que se refleja en violencia, secuestros, inseguridad pública, narcotráfico, guerrilla, impunidad, corrupción y ataques constantes al valor sagrado de la vida humana, desde la concepción hasta su término natural.
En su mensaje conjunto de Cuaresma, los nueve obispos de las diócesis asentadas en territorio del estado de Veracruz exhortan a fieles católicos, autoridades civiles y sociedad en general a unir sus esfuerzos y apostar por una cultura a favor de la vida.
Señalan que desde hace varios años, el país entero observa con "gran tristeza humana y preocupación cristiana" el avance de la llamada "cultura de la muerte" tanto en México como en el mundo entero. Esta realidad se caracteriza por todo cuanto se opone a la vida, como los homicidios, el aborto, la eutanasia y el suicidio; lo que viola la integridad de la persona, como secuestros, violaciones, asaltos en las calles y en las propias casas y oficinas, las torturas corporales y mentales, el robo de niños, el alcoholismo, la drogadicción y el narcotráfico, así como la guerrilla y el terrorismo.
Todo lo anterior se añade a la miseria y pobreza extremas, impunidad, corrupción, encarcelamientos arbitrarios, prostitución de mujeres y niños, imposición masiva de esterilización de mujeres en varios sectores y distribución en gran escala de anticonceptivos, así como condiciones infrahumanas de trabajo, vivienda, sanidad y seguridad social, ofenden profundamente la dignidad humana.
Los obispos de Veracruz ratifican, en solidaridad con el papa Juan Pablo II, el valor de la vida humana y su carácter inviolable, en relación con las circunstancias actuales y los múltiples atentados que hoy la amenazan.
"Estamos seguros de que todo hombre abierto sinceramente a la verdad y al bien, aún entre dificultades e incertidumbres, con la luz de la razón y todavía más con el auxilio de la fe, puede llegar a descubrir en la ley natural escrita en su corazón el valor sagrado de la vida humana desde su concepción hasta su término natural, y afirmar el derecho de cada ser humano de ver respetado totalmente este bien primario suyo. Los cristianos tenemos la certeza de que en el reconocimiento de este derecho se funda la convivencia humana y la misma comunidad política".
Los obispos exhortan a los mexicanos a sumar esfuerzos para vencer la impresionante multiplicación y agudización de amenazas a la vida de las personas, a su integridad física y mental y dignidad. Piden a Dios "nos dé capacidad de trabajar inteligentemente por un aumento de la justicia y la solidaridad", para lograr una nueva cultura de la vida humana y edificar una auténtica civilización de la verdad, el amor y la solidaridad.
El mensaje, el cual ya es leído en todas las iglesias de las diócesis de Veracruz, lo suscribe Sergio Obeso, arzobispo de Xalapa y ex presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano, y los obispos Lorenzo Cárdenas, de Papantla; Luis Gabriel Cuara, de Veracruz; Eduardo Patiño, de Córdoba; Hipólito Reyes, de Orizaba; Guillermo Ranzahuer, de San Andrés Tuxtla, y Carlos Talavera, de Coatzacoalcos, así como Felipe Osorio, administrador diocesano de Tuxpan, y José Guadalupe Padilla, obispo emérito de Veracruz.