Ť Asistieron dirigentes de todos los partidos, excepto de Euskal Herritarrok
Protestan unas 60 mil personas en el País Vasco contra la creciente ola de violencia de ETA
Ť El ministro del Interior español y el líder del Partido Popular, abucheados por asistentes
ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL
Madrid, 10 de marzo. Unas 60 mil personas, según la policía, se concentraron este sábado en Portugalete, la localidad natal del policía vasco asesinado el pasado jueves en un atentado con coche-bomba atribuido a la organización armada vasca ETA, para protestar por la violencia etarra.
A la manifestación de pesar colectivo asistieron representantes de todos los partidos políticos vascos, excepto Euskal Herritarrok (EH, marca electoral de Herri Batasuna, considerado brazo político del grupo armado separatista).
El ministro del Interior español, Mariano Rajoy, y Carlos Iturgáiz, líder del conservador Partido Popular (gobernante en España) fueron abucheados a su llegada al sepelio.
En tanto, la policía francesa detuvo en la región de Las Landas a cuatro personas, entre ellas a dos supuestos líderes de ETA, Zorian Zamakola, considerado por el Mi-nisterio del Interior español mano derecha de Mikel Antza, número tres del grupo armado, y Ander Etxebarría, prófugo desde marzo del año pasado tras ser identificado como uno de los líderes de la violencia ca-llejera en el País Vasco.
Iñaki Totorika murió en la noche del jueves al viernes en Hernani, convirtiéndose en la víctima número 27 desde que el grupo armado vasco decretó el final de la tregua unilateral en 1999.
Los familiares de Totorika difundieron a la prensa un mensaje en el que pidieron que "con la sepultura" de Totorika "se entierren también la confrontación y la violencia en el País Vasco".
Sin embargo, Rajoy e Iturgaiz fueron abucheados y recibidos con gritos de "fuera". Al contrario, el presidente del gobierno vasco, el nacionalista moderado Juan José Ibarretxe, fue aplaudido a su entrada al re-cinto religioso.
Tras el sepelio, unas 60 mil personas marcharon encabezados por una pancarta que rezaba "ETA no. Paz y libertad", sostenida por los representantes políticos nacionalistas y no nacionalistas, entre ellos Rajoy, Ibarretxe, Nicolás Redondo, Rosa Diez y Javier Madrazo.
EH, el único partido que no participó en la marcha de protesta, expresó en un comunicado su "solidaridad" con los familiares de Totorika y "con los detenidos los últimos días y que se encuentran incomunicados", en alusión a los 16 jóvenes vascos apresados la semana pasada por formar parte de la organización Haika, órdenes de detención impartidas por el juez Baltasar Garzón, de la Audiencia Nacional de España.
La organización independentista añadió que "los lamentables sucesos de ayer en Hernani, como otros acontecimientos de los últimos días, decenas de detenciones, malos tratos, amenazas, vejaciones en comisarías, han puesto en evidencia, de nuevo, que el conflicto que enfrenta a Euskal Herria con los estados español y francés sigue con toda su crudeza".
En tanto, varios miles de manifestantes independentistas vascos se congregaron la noche del sábado en el velódromo de Anoeta de San Sebastián bajo el lema "la soberanía es la paz".
Tras el robo de mil 600 kilogramos de explosivos el pasado miércoles, la policía francesa ordenó la alerta máxima en sus fuerzas del orden y puso en marcha un fuerte dispositivo de seguridad en las carreteras y zonas fronterizas con España.
El Ministerio del Interior español confirmó que entre los detenidos se encuentra Zorion Zamakola Ibaibarriaga, de 30 años de edad y considerado el número tres de la organización separatista.
Zamakola fungía, siempre según el go-bierno español, como primer lugarteniente del jefe del aparato militar detenido el pasado mes, Javier García Gaztelu, Txapote.
El detenido también es considerado como responsable del aparato político de ETA y mano derecha de Mikel Antza, el dirigente etarra que se mostró favorable a mantener una reunión con el gobierno del presidente José María Aznar, en plena tregua unilateral del grupo armado.