DOMINGO Ť 11 Ť MARZO Ť 2001

Ť Defiende el almirante Arancibia la acción de las policías represivas de la dictadura

Aplicar la ley de amnistía pinochetista, exige el comandante en jefe de la armada chilena

Ť Los militares ya hicieron todo lo posible para cerrar el debate sobre violaciones, señala

Ť Critica el marino al Poder Judicial y organizaciones defensoras de los derechos humanos

AFP Y AP

Santiago, 10 de marzo. El comandante en jefe de la armada chilena, almirante Jorge Arancibia, insistió en que las fuerzas armadas de su país "ya hicieron todo lo posible" para cerrar el prolongado debate nacional sobre las violaciones contra los derechos humanos, y abogó por la aplicación de la ley de amnistía del pinochetismo.

El magistrado de la causa contra Augusto Pinochet, Juan Guzmán Tapia, efectuó una visita sorpresiva a Calama, una de las paradas de la caravana de la muerte, e interrogó a testigos de la captura de presos políticos fusilados por el régimen militar.

Asimismo, el juez reconoció dependencias de la prisión de la ciudad, de donde los disidentes fueron sacados por los militares antes de fusilarlos sin proceso alguno.

En declaraciones al periódico La Tercera, Arancibia señaló que "nosotros ya hicimos todo lo que pudimos" y "ahora apliquemos la amnistía", en alusión a ley de olvido de delitos de 1978 promulgada por Pinochet, y que ha sido repudiada por los opositores políticos y organizaciones defensoras de los derechos humanos.

No obstante, esa ley ha sido aplicada irregularmente en los últimos años conforme a una nueva interpretación judicial, según la cual los casos deben ser investigados cabalmente antes de beneficiarse al infractor. Además, acorde con ese criterio, se considera que mientras los desaparecidos no aparezcan hay delito y no es aplicable.

El jefe naval también criticó a los defensores de los derechos humanos y al Poder Judicial por el procesamiento del ex dictador, tras numerosas querellas en su contra que suman más de 200, y porque no se ha observado en sentido estricto la amnistía.

"Nuestro mensaje más íntimo, que era tratar de llevar una respuesta a una necesidad hasta entonces insatisfecha, no fue recibida como queríamos por las personas a quienes se destinó", expresó dolorido en re-ferencia a la mesa de diálogo cívico-militar, que en enero pasado presentó un informe sobre desaparecidos.

Calificó de "sorprendente" la querella que presentaron en contra de los comandantes en jefe de las fuerzas armadas los familiares de las víctimas de la dictadura, quienes los acusaron en febrero de "obstrucción de la justicia" por considerar que ocultaron información deliberadamente so-bre la actuación de los militares.

Se estima que hay unos mil 200 desaparecidos, y en el informe de la mesa de diálogo el ejército, la armada, la fuerza aérea y la policía militarizada entregaron datos sólo de 200 opositores políticos capturados du-rante el régimen militar, de los que se apenas se hallaron los restos de ocho en fosas clandestinas.

Los familiares se declararon indignados al confirmarse que muchos de los suyos fueron asesinados y lanzados al mar.

Pero Arancibia lamentó la respuesta de los familiares, al reprochar que "no querían mesa --de diálogo--, no querían respuestas, perdón tampoco. Todo lo plantean en sentido negativo".

Arancibia, defendió la actuación de las policías represivas del pinochetismo denominadas Dirección de Inteligencia Nacional y su sucesora Central Nacional de In-formaciones, al apuntar que ellos hicieron "un esfuerzo extraordinario" y se ha olvidado que "hubo acción terrorista".