Ť El titular de la Secretaría del Trabajo descarta alzas salariales de emergencia

La reforma laboral, irreversible, dice Abascal

Ť Se acabó el gobierno benefactor que distribuía beneficios fiscales, advierte a sindicatos

HUMBERTO ORTIZ MORENO

De cara al proyecto de reforma a la legislación laboral, y en un entorno de desaceleración económica estadunidense, que ya ha provocado la cancelación de 19 mil 600 plazas de trabajo en México, Carlos Abascal Carranza advirtió a las organizaciones sindicales que ya no deben esperar un gobierno benefactor que distribuya los beneficios fiscales a su entero arbitrio para generar masas de votantes cautivos.

"Eso se acabó", sentenció el secretario del Trabajo y Previsión Social, y se pronunció por un nuevo sindicalismo patronal y laboral que, con respeto a la autonomía de las agrupaciones, propicie la libre participación y la correspondencia, y nunca más proteja privilegios políticos de cualquier clase o de partidos. Quien se autoexcluya de los cambios, aseveró, mostrará algún signo de inmadurez sindical.

Ya no más de lo mismo, remarcó, porque significaría que los programas sociales mantuvieran la discrecionalidad en la distribución de recursos sólo para apuntalar la paz social. Tampoco es posible ahora engañar a la gente con aumentos salariales de emergencia que no responden a la productividad.

El proceso de reforma laboral es irreversible, y la profundidad y contenido de la misma serán resueltos por los sectores productivos, puntualizó. Si los cambios no son producto del consenso y del diálogo, "será inútil intentarlo", dijo.

Con el funcionario coincidiría después Adolfo Tena Morelos, presidente de la Comisión de Asuntos Laborales de la Coparmex, al afirmar que cualquier cambio a la legislación del ramo no significará desaparecer el derecho de huelga ni las ventajas económicas de los asalariados, sino flexibilizar las disposiciones en cuanto a las obligaciones de los obreros, sin paternalismos, a fin de dejar de proteger al trabajador malo e irresponsable y desaparecer escal  afones ciegos, "ofensivos e hirientes", que representan un anacronismo legal desajustado de la propia Constitución.

Según Abascal, el proyecto deberá estar listo dentro de ocho o 12 meses. Sin embargo, aclaró que si no se pone un límite a los tiempos del diálogo, "se nos pudrirían las ideas".

El titular de la STPS habló en el último día de trabajos de la 78 Asamblea Nacional Ordinaria de la Coparmex, organismo que presidió hace cinco años. Ahí dijo que todo cambio no ha de imponer un dique al torrente globalizador imposible de contener.

Preocupantes cifras de desempleo

Reconoció que las cifras sobre empleo, desocupación y subempleo son "verdaderamente preocupantes" en el país, y hoy no es posible "darnos el lujo" de tener una población económicamente activa (PEA) en México de aproximadamente 39.6 millones de personas, 18 millones inmersas en la economía informal y 20 millones más no disponibles por ser amas de casa o estudiantes, entre otras cosas.

"No podemos permitirnos tan alto porcentaje de trabajadores" sin protección económica ni legal, ni tampoco que el país siga siendo solamente generador de mano de obra barata, insistió.

Abascal Carranza alertó que si no se desarrollan a toda velocidad los conocimientos de los obreros mexicanos, seguiremos siendo un pueblo subordinado y explotable, con salarios, nivel de vida y un mercado interno bajos