Ť El sacerdote francés había sido expulsado de México por autoridades migratorias
Michel Chanteau regresará a Chiapas
Ť Otros clérigos extranjeros podrán reingresar, por gestiones de la diócesis de San Cristóbal
DE LA CORRESPONSALIA
Tuxtla Gutiérrez, Chis., 9 de marzo. Michel Chanteau, sacerdote de origen francés que oficiara en la diócesis de San Cristóbal de las Casas, regresará a Chiapas luego de que las autoridades migratorias revocaran la orden de expulsión que le fue impuesta en febrero de 1998 por denunciar la complicidad de las autoridades en la matanza de Acteal.
La circunscripción eclesiástica, por medio de su órgano informativo, El Caminante, dijo que el sacerdote será el primero en retornar de casi una docena de clérigos extranjeros que abandonaron el país a consecuencia de la represión que emprendió el gobierno federal en su contra.
Durante 33 años el clérigo estuvo asignado al municipio de Chenalhó, de donde fue sacado por la fuerza el 27 de febrero de 1998, después de denunciar la complicidad del gobierno en la masacre donde murieran 45 indígenas tzotziles.
El gobierno federal le aplicó el artículo 33 constitucional al considerarlo un extranjero no deseable, al igual que otra media docena de sacerdotes que colaboraban con el ahora obispo emérito Samuel Ruiz García.
Según el párroco, tres meses antes de su expulsión había sido amenazado de muerte por el entonces presidente municipal de Chenalhó, el priísta Jacinto Arias Cruz, preso hoy en el penal de Cerro Hueco por su implicación en la matanza.
"Chanteau es el primero de los sa- cerdotes expulsados que regresarán a México por gestión de nuestra dióce-sis y del interés del obispo Felipe A- rizmendi Esquivel", señala la nota informativa.
Al salir expulsado fue enviado a París, Francia. El gobierno federal sufragó los gastos, pero el religioso se encontró con algo peor: sus familiares directos ya habían muerto, por lo que pidió a la Iglesia católica ser enviado a Guatemala para trabajar con los indígenas de aquel país y así sentirse cerca de la tierra que habitó más de 30 años.
En 1995 también fueron expulsados del país el sacerdote español Rodolfo Izal; el argentino Jorge Varón y el estadunidense Loren Rieve Estrella, quienes interpusieron ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos una queja contra el gobierno de México, por la violación de sus derechos.