MARTES Ť 6 Ť MARZO Ť 2001
Ť En diciembre se perdieron 23 mil 737 empleos en el sector, reporta el CEESP
Se desacelera la industria maquiladora de exportación
Ť Preocupa aumento del déficit comercial; en diciembre fue 113.2% mayor al de un año antes
DAVID ZUÑIGA
La desaceleración ya empezó a golpear a la industria maquiladora de exportación. De acuerdo con cifras del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), en diciembre se perdieron 23 mil 737 empleos en estas empresas, que dan trabajo a un millón 308 mil mexicanos.
Además, las remuneraciones reales pagadas por la industria maquiladora han empezado a decrecer en términos reales: si bien durante el año pasado los sueldos aumentaron 6.8 por ciento, en noviembre habían crecido a una tasa de 10 por ciento, que para diciembre se redujo a 5.8 por ciento.
En el resto de la industria manufacturera, agrega el CEESP en su reporte semanal, el daño fue todavía mayor, pues el número de plazas a diciembre pasado era 0.8 por ciento menor al de un año antes y el personal empleado se redujo 0.5 por ciento en comparación con noviembre.
El aumento promedio de los salarios en la industria de la transformación durante 2000 fue de 6 por ciento. En diciembre las remuneraciones reales por trabajador crecieron a una tasa de 5.1 por ciento.
Otra cifra que preocupa a los analistas privados es el crecimiento del déficit comercial: durante enero fue de mil 224 millones de dólares, monto que si bien es menor en 285 millones de dólares en comparación con el de diciembre, es 113.2 por ciento mayor al del mismo mes del año pasado.
Más impuestos, para pagar deudas heredadas por Zedillo
En su estudio, el CEESP reconoce que la deuda generada por los Programas de Inversión con Registro Diferido en el Gasto (un mecanismo diseñado por el gobierno para financiar obras de infraestructura energética a costos muy elevados pero sin que aparecieran en los registros contables), la del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB) y los pasivos del sistema de pensiones hacen que el déficit público en realidad sea de 4 por ciento del producto interno bruto y no de 0.65 por ciento, como aparece en el presupuesto.
Al respecto, el organismo privado señala que estas cifras hacen más clara la urgencia de una reforma hacendaria.
Sin una base de ingresos sólida y estable, advierte, será imposible consolidar finanzas públicas sanas a largo plazo y difícilmente podremos lograr la estabilidad macroeconómica necesaria para lograr tasas de interés competitivas, inflación baja y menor riesgo cambiario.