LUNES Ť 5 Ť MARZO Ť 2001

Ť Sólo él correra la prueba en el Mundial de Edmonton

Espinosa y Fernández triunfan en el Maratón Lala e imponen marca

Torreon, Coah., 4 de marzo. El potosino Andrés Espinosa y la capitalina Adriana Fernández ganaron aquí el maratón Lala con nuevas marcas de la prueba y obtuvieron el derecho de representar a México en el Campeonato Mundial de Atletismo en Edmonton, Canadá.

Igualmente acudirán los mexiquenses Benjamín Paredes (2:15.30) y Dulce María Rodríguez (2:32.00), que cumplieron con el tiempo tope al ubicarse en segundo lugar.

Los dos primeros se llevaron la prueba de punta a punta y realizaron un crono de 2:10.57 y 2:30.29, respectivamente. Superaron las marcas de Martha Tenorio (2:34) y de Paredes (2:11.22) establecidas el año pasado en el maratón del Pacífico y el de la Comarca Lagunera.

Los vencedores se llevaron un premio de 150 mil pesos y 50 mil más por los registros impuestos y una camioneta, además de una beca mensual de 10 mil pesos que los organizadores entregarán a los cuatro seleccionados hasta el mundial canadiense, en agosto próximo.

Considerados favoritos para llevarse la prueba de largo aliento, Espinosa y Paredes, de 39 años de edad, no tendrán problemas para ir al mundial.

Sin embargo, la situación entre las damas es desconcertante, ya que la Federación Mexicana de Atletismo estableció este certamen selectivo para maratón y tanto Adriana como Dulce María han desistido correr, ya que tienen programado competir en los 5 mil y 10 mil metros, en Canadá.

Fernández tiene el compromiso de la competencia de Londres, el 8 de abril, y ha manifestado su interés por participar en el mundial exclusivamente en pruebas de pista.

Isaac García y María Portillo ocuparon el tercer sitio, y aunque no dieron la marca mínima de 2:16 y 2:36 que se les pedía, serán evaluados por la comisión técnica de la FMA para asistir a Edmonton.

El keniano Steven Kori llegó en sexto lugar, en tanto que la rusa Albina Galliamova cruzó la meta en cuarto sitio en medio de un conmovedor llanto, luego de recibir la noticia de que su padre había fallecido.