LUNES Ť 5 Ť MARZO Ť 2001
Ť Insta al PRI a emprender una "revolución" para retomar el poder
Advierte Sauri que "no pasará" en el Congreso la iniciativa foxista de una nueva Constitución
Ť Señala que debe renovarse el pacto interno para "conjurar el peligro de la desunión" e impedir que la reacción termine de aniquilar al instituto político Ť Excluyen a disidentes del acto por el 72 aniversario del tricolor Ť Denuncia "asedio" de enemigos contra su partido
ENRIQUE MENDEZ Y ALEJANDRO GONZALEZ ENVIADO Y CORRESPONSAL
Gueretaro, Gro., 4 de marzo. El Partido Revolucionario Institucional conmemoró su aniversario 72 con la advertencia de que "no pasará" en el Congreso de la Unión una eventual iniciativa del presidente Vicente Fox Quesada para redactar una nueva Constitución Política del país, y un discurso retador de la presidenta del tricolor, Dulce María Sauri Riancho, quien convocó a los priístas a "una nueva revolución" que les permita recuperar el poder.
En el Teatro de la República, al que se impidió el acceso a grupos disidentes y a dirigentes de comités seccionales del estado de México y del Distrito Federal, la presidenta del PRI resaltó que el priísmo no se confinará en la oposición, y respecto a la perspectiva de que el mandatario, que pretende constituirse "en la encarnación del Estado", convoque a un congreso constituyente, insistió: "šAquí estamos para impedirlo! Nuestra batalla será por la nación, que se halla en riesgo, en peligro."
Pero para que se pueda llevar a cabo esa revolución -de la que no quiso abundar al salir del teatro-, e impedir que "la reacción" acabe por aniquilar al partido, dijo que debe renovarse el pacto interno en el que todos los militantes y dirigentes se comprometan a ver antes por el interés del instituto político, que por los propios, y "conjurar el peligro de la desunión".
"Nadie -agregó- tiene derecho a dilapidar nuestra fuerza ni poner en riesgo nuestro futuro y la subsistencia del partido. Para poder resistir a la reacción, debemos preservar nuestra unidad y fortaleza. šun muro infranqueable que contenga a la reacción e impida el retroceso!"
Que cumpla Fox
Por primera vez, Sauri Riancho cuestionó a los priístas, quienes olvidándose de su militancia han aceptado cargos en el gabinete de Fox Quesada, el cual además -sostuvo- ha convertido a los órganos de justicia electoral en "instrumentos para arremeter" contra el partido.
Los enemigos del PRI, dijo, lo acosan "con sus propias fuerzas y con la que toman prestada de los compañeros del camino, de quienes han desertado de nuestras filas y de quienes fueron amigos ayer y son adversarios hoy, bajo una consigna bien sabida, pragmática y lucrativa: 'El rey ha muerto, viva el rey'".
En su discurso de 45 minutos, que fue transmitido en vivo a los 30 comités directivos estatales y al del Distrito Federal, Sauri Riancho dijo que como el Presidente de la República no ha publicado las leyes que permiten la legalización de los automóviles chocolate y la de Desarrollo Rural, los priístas exigirán en la calle, con movilizaciones, que cumpla con oferta de toma de posesión, de que el Ejecutivo propone y el Legislativo dispone.
Para reforzar la imagen de que aun derrotado el 2 de julio, el PRI no está en decadencia política, resaltó: "No estamos derrotados ni abatidos; tenemos el ánimo firme y la voluntad entera. Hay que decirlo aquí mismo, donde nació nuestro part ido y donde otro partido recibió la dura lección de los combativos mexicanos. šLo nuestro, en este Teatro de la República; lo de ellos, en el Cerro de las Campanas! Unos y otros subsisten; son símbolos vigentes; sirvieron ayer, pueden servir mañana".
La referencia al Cerro de las Campanas, que el gobernador Ignacio Loyola Vera utilizó para sugerir la idea que ahí también debieron ser fusilados los comandantes zapatistas que continúan su marcha hacia la ciudad de México, fue recibida por los priístas con una ovación.
Sauri reivindicó para su partido el progreso auspiciado por los gobiernos priístas, que durante siete décadas dejaron en el país su "huella creadora".
"No lo deben olvidar quienes dicen, con ceguera y con torpeza, que México perdió todas estas décadas, y que apenas hoy, sí, hoy, comienza a vivir. šEso, señores, confunde la historia de la nación con su modesta biografía personal!"
Revolución contra la derecha
Frente al "desprecio" del actual gobierno por pasajes históricos como la Revolución y la reunión del Constituyente Permanente en este mismo Teatro de la República, dijo que el PRI se asume como heredero de ambos episodios.
"Reiteramos -declaró- el antiguo compromiso de los priístas, en este teatro, que otros eluden por su ignorancia o por su repudio a la historia", y en referencia al debate que se inició en el aniversario de la firma de la Constitución, dijo que ésta no se dio en un "cenáculo ni fue trabajo de eruditos o iniciados.
"Fue Constitución popular, hecha para satisfacer reclamaciones legítimas y colocar el poder al servicio del pueblo que la inspiraba. Deploramos que otros olviden la protesta que hicieron y hoy quieran abolir lo que ayer ofrecieron cumplir".
Dijo que en estos años, han abundado las "aventuras" para derogar los principios y valores constitucionales, pero que todos han fracasado, y planteó que la nueva revolución priísta, como las que antes "derrotaron a la reacción encaramada en el poder", lo hará una vez más.
"Lo haremos como lo hicimos cada vez que fue necesario. Ahora lo es, a despecho de su fuerza aparente y de su soberbia manifiesta, aunque una y otra vez se traduzcan en leyes, acuerdos y sentencias que en el fondo son sólo jactancias, discursos, falacias. Por ello serán barridos de la historia que va de la mano con el pueblo, que tiene experiencia en esas cosas y sabe barrer."
El reino de la militancia
La presidenta priísta dijo que a partir de ahora, el PRI dio la vuelta a la página de su historia para iniciar "un nuevo capítulo, una nueva escritura" que será redactada "del puño y la letra de los priístas, de nadie más".
Perdida la Presidencia de la República el 2 de julio de 2000, reiteró que se acabó el "eje articulador" en el partido que representaba el mandatario en turno, del que aceptaron "por libre decisión, porque no hubo tiranía", métodos y estilo. "Aceptamos la orientación y el arbitraje, ni lo ignorábamos ni lo combatíamos", expresó.
Esa fecha fatal, dijo, debe quedar ya en la historia. "No nos confinaremos en el pasado a riesgo de impedir el futuro. Lo que pasó, pasó; ahora, este 4 de marzo del año 2001 vivimos otro momento, aquí abrimos el espacio de una nueva oportunidad", dijo.
Asediada durante meses por priístas que pretendían controlar al partido, Sauri insistió en que nadie, ningún grupo, "por importante o vigoroso que sea, puede ocupar el sitio que dejó vacante la figura presidencial. No es posible y tampoco lo permitiríamos. Ese sitio sólo puede ser colmado por todos los priístas".
De los conflictos internos, Sauri Riancho pasó a la denuncia pública del "asedio" en contra del partido. Se hace, agregó, con una doble intención que tiene un mismo origen y un mismo objetivo: "reducir, intimidar y destruir a esta organización política, y con ello abatir, impedir la defensa del nacionalismo, la independencia y la soberanía nacional, la defensa de los intereses fundamentales del pueblo mexicano, que representa nuestro partido".
Los enemigos del PRI, subrayó, han resuelto arremeter nuevamente contra el partido, "en forma sistemática y deliberada. No se trata de una contienda política por el poder inmediato, que se agotaría en una elección; se trata de una contienda histórica por el poder total".
Más que "aires democratizadores", dijo que en el país "soplan vientos autoritarios" que desde el gobierno federal, y con el respaldo de los fallos del tribunal electoral, que "tuerce la ley", pretenden destruir al Revolucionario Institucional.
En la práctica, dijo, la intención inicial de que el tribunal electoral se constituyera en una instancia que resolviera los conflictos poselectorales, "se ha oscurecido", pues cada sentencia de los magistrados genera otro problema, porque "en unos casos se tuerce la lectura de la ley" y en otros, como en el de Yucatán, "se avanza sobre facultades que pertenecen a otros órganos soberanos".
Refirió que para evitar que este ambiente sea "un anuncio de la suerte que aguarda a futuras elecciones y una expresión del estado de sitio" que pretende imponerse al tricolor, éste presentará al Congreso de la Unión una iniciativa de reformas para "rescatar la justicia electoral".
Asimismo, expresó la preocupación priísta por el modo de gobernar del presidente Fox y su gabinete, porque lo que en un principio pareció ser "protagonismo trivial" está a punto de convertirse "en pauta de comportamiento y método de gobierno".
Dos enfermedades morales
En este punto, cuestionó "la proscripción de (Benito) Juárez" de la residencia oficial de Los Pinos, que es "casa de la nación, no de un inquilino particular", en referencia a que el retrato del Benemérito de las Américas se trasladó al despacho del secretario de Gobernación, Santiago Creel Miranda.
"La proscripción se podrá, pero retirar, como pretende, los sentimientos del pueblo, šesto jamás!", exclamó entre gritos de "šJuárez, Juárez, Juárez!", de los 700 priístas reunidos en el teatro.
Sauri reivindicó también las demandas del zapatismo y la de los pueblos indígenas, y arremetió contra el gobernador Ignacio Loyola Vera, quien ha declarado que los comandantes zapatistas deberían ser fusilados por traición a la patria.
"Estas son las respuestas del racismo y de la reacción, dos enfermedades morales que todavía padecen algunos individuos, desgraciadamente con micrófono y acceso a la opinión pública, con ellas se ahondan las injusticias y los agravios se multiplican; la causa justa de los pueblos indios y de las comunidades indígenas, no quepa duda, es la causa del Partido Revolucionario Institucional", declaró.
Previamente, la diputada Beatriz Cervantes Mandujano advirtió que los jóvenes priístas con cargos de elección popular no permitirán que pasen las reformas foxistas en el Congreso, y reclamó para las juventudes, que aún militan en el PRI a pesar del desencanto que las directivas les han generado, oportunidades políticas. "No por los cargos, sino por aportar y por nuestros deseos de reformar el entorno. Cuando nos han dado la oportunidad, no fallamos".