Ť Los errores y el estéril ataque volvieron a hundir a los mexicanos

El Tricolor también veta a la alegría; 2-0 ganó Estados Unidos

Ť Josh Wolff y Ernie Stewart marcaron los goles en el segundo tiempo del encuentro

Ť Al final, hasta un conato de bronca hubo en la congeladora de Columbus, Ohio

Columbus, ohio, 28 de febrero. La alegría también quedó vetada para los seguidores de la selección mexicana de futbol. El representativo de Estados Unidos obtuvo los primeros tres puntos, al dar cuenta por 2-0 del tricolor en el estadio-refrigerador Columbus Crew, en la apertura del hexagonal final rumbo al Mundial del 2002.

La selección mexicana parecía que mejoraría, en relación a los malos resultados previos a esta eliminatoria, pero al final continuó envenenándose con sus errores y la impotencia para generar jugadas de verdadero peligro al frente. Sólo una vez inquietó al portero Brad Friedel, cuando al minuto 69 Francisco Palencia lanzó un disparo por el sector derecho, que terminó rechazando el guardameta.

México, que liga cinco derrotas entre partidos amistosos y oficiales, amplió a 29 años una pésima racha, pues no ha podido derrotar a Estados Unidos en su territorio, dentro de una eliminatoria mundialista, desde 1972.

Sin grandes emociones, la primera mitad rápidamente se sumió en un monólogo de desorden, sobre todo en el medio campo, y marca profusa.

Estados Unidos se complicó la vida temprano, al acusar un par de bajas, la primera del delantero Brian McBride, que salió antes del cuarto de hora, debido a una hinchazón en el ojo derecho y fue remplazado por Josh Wolff. Además, Claudio Reyna sufrió una lesión en la pierna derecha y su papel de conductor de los hilos en el mediocampo fu casi nula y se fue tranquilo a los 42 minutos.

México vivió sus mejores momentos en el primer tiempo, apoyado en su zaga con línea de tres centrales: Claudio Suárez, Rafael Márquez y Alberto Macías.

Aunque el buen funcionamiento de la zaga se diluía a partir del mediocampo, armado con tres americanistas: Germán Villa, Pável Pardo y Braulio Luna.

El mayor problema de los mexicanos se presentó en el ataque, con Luis Hernández perdido en el terreno y dejando sólo en su lucha a Palencia.

Estados Unidos cambió la historia en el primer minuto del segundo tiempo, aprovechando una pésima salida del portero Jorge Campos, quien fuera del área dejó la pelota en los botines de Wolff, para que anotara tranquilamente el 1-0.

El entrenador mexicano Enrique Meza buscó revertir la desventaja y desarmó su línea de cinco zagueros para dar entrada al extremo Miguel Zepeda.

Pero ni Zepeda ni Víctor Ruiz o Jesús Arellano, quienes entraron por Márquez y Luna, respectivamente, pudieron cambiar el rumbo del encuentro.

Una notable jugada de Wolff, cuando expiraba el partido (87´), terminó de noquear a los mexicanos. Wolff desbordó por la derecha y mandó un pase retrasado para Ernie Stewart, quien a boca de jarro puso el balón en el fondo de la red para el 2-0. Para lo único que hubo tiempo después fue para un conato de bronca.

Así, los aproximadamente 24 mil espectadores vieron cómo Estados Unidos se mantiene imbatible en los últimos 17 partidos en casa, y que hace dos años no pierde con México, que se encuentra en plena sequía anotadora, entre otros problemas. (Agencias)