Ť Aplaude Raúl Carrancá la expulsión de la UNAM "de esos salvajes que calumnian"
Improcedente, la demanda de amparo contra la resolución del Tribunal Universitario: Valadés
KARINA AVILES Y CLAUDIA HERRERA
En opinión de Diego Valadés, la demanda de amparo contra la resolución del Tribunal Universitario (TU) que determinó la expulsión definitiva de seis paristas es improcedente, porque la Universidad Nacional Autónoma de México no es autoridad responsable para ese efecto, y afirmó que el TU es un órgano apegado a disposiciones constitucionales. En otro foro, el penalista Raúl Carrancá aplaudió las sanciones a "esos salvajes que calumnian y se sirven de la palabra vana y estéril", y que pueden ampararse ante cualquier juez de distrito, pero "habría que ver si se admite o no" ese recurso.
El
titular de la Secretaría de Educación Pública, Reyes
Tamez Guerra, respaldó la decisión, y dijo que si estos pretenden
entrar a otra universidad pública y cubren los requisitos de admisión,
tienen "absoluta apertura" para hacerlo.
La universidad, dijo, tomó esa determinación en el marco de su autonomía, y conforme a la reglamentación de sus órganos internos. "Nosotros respaldaremos las decisiones de la institución", expresó.
Los sancionados cuentan con un plazo de cinco días hábiles para interponer el recurso de revisión ante la Comisión de Honor del Consejo Universitario (CU), que puede ratificar, modificar o revocar las resoluciones del TU, informó Valadés. En tanto, Carrancá y Rivas hizo votos por que esa instancia del CU no revoque la decisión del TU, e incluso, se dijo convencido de que no lo hará por "la cantidad de anti-inteligencia" de los expulsados. Unos paristas que asistieron al anexo de la Facultad de Derecho para atestiguar las palabras de Carrancá, le gritaron al final: "¿Por qué no dices que defiendes a los narcotraficantes?", "¡Fascista!". Entonces, debió irse a su cubículo para responder a las preguntas de los medios de comunicación.
En otra conferencia, en el Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ), Diego Valadés manifestó que los señalamientos de que las disposiciones disciplinarias en la UNAM pueden asimilarse con leyes privativas que la Constitución prohíbe, o decir que la naturaleza del TU es la de un tribunal especial, son apreciaciaciones "infundadas".
Explicó que las normas disciplinarias en la UNAM no están destinadas "al alumno A, B o C o al profesor A, B o C", se aplican a "todo" estudiante o profesor. Por cuanto a los tribunales especiales, dijo que son los constituidos para conocer un asunto determinado y enjuiciar a una persona o grupo de personas en especial, lo cual no es el caso.
El Tribunal Universitario, apuntó, funciona y está estructurado en los términos del sistema constitucional mexicano. Aclaró que una cosa son los tribunales especiales y otra los especializados. Se le preguntó sobre el acuerdo que tomó el congreso universitario en 1990 de desaparecer al TU. Al respecto, respondió: "El congreso se refirió a aquel tribunal, al que existía en el 90, pero éste es otro tribunal, se hizo una modificación profundísima que entre otras cosas estableció un derecho fundamental que está en la Constitución: el respeto de la garantía de audiencia, que no existía en el tribunal previo, entonces, comparto las observaciones y reservas que se tenían del tribunal existente en 1990, pero el actual tribunal no es el del 90".
Sobre si es procedente que los sancionados promuevan un juicio de amparo, expresó que "hasta el momento existe jurisprudencia por parte de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en el sentido de no considerar como autoridad responsable para efectos de amparo a la UNAM".
No obstante, manifestó su respeto a cualquier posible decisión del Poder Judicial de la Federación ante tal posibilidad: "si el Poder Judicial admite la demanda, acepto que tendrá sus razones; si rechaza la demanda, pues estimo que tendrá sus razones".
Dijo que no considerar a la UNAM como autoridad responsable para efectos de amparo no debe entenderse como forma de respetar o no la autonomía, "ni puede entenderse que si se deja de considerar ese criterio se afecta de alguna manera la autonomía".
En otra conferencia en la FD, en la que participaron consejeros universitarios y técnicos del plantel para manifestar respaldo y aplaudir la decisión del TU, Raúl Carrancá expresó: "Nos congratulamos de que gente de esa antidimensión intelectual y moral sea expulsada de la UNAM".
Hizo votos por que las expulsiones sirvan de ejemplo a nivel nacional, y añadió que sería "deseable" que las autoridades universitarias revisen los expedientes de los profesores que han "denigrado la academia" e "instigado" a paristas a cometer "fechorías".
Sobre la demanda de amparo, dijo que los sancionados tienen "todo el derecho del mundo" a ese recurso, "pero habría que ver si se admite o no". Consideró que los miembros del CGH seguirán "alterando" el orden universitario, pero afuera de la institución "esperamos" que el jefe de gobierno capitalino proteja a la ciudadanía.
El Tribunal Universitario cuenta con un plazo de tres días hábiles para remitir el expediente a la Comisión de Honor del Consejo Universitario, que a su vez tendrá para resolver en definitiva un plazo de ocho días hábiles prorrogable.